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a Josue Pacalla 4 éve

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AMÉRICA EN EL SIGLO XVIII

En el siglo XVIII, América y Europa experimentaron significativos cambios políticos, sociales y económicos. En Europa, el sistema de gobierno absolutista se sustentaba en la creencia del derecho divino de los reyes, mientras que las desigualdades sociales eran marcadas entre los privilegiados y los no privilegiados.

AMÉRICA EN EL SIGLO XVIII

AMÉRICA EN EL SIGLO XVIII

Las nuevas ideas. Los Borbones en España.

LA ENCICLOPEDIA
En Inglaterra surgió, por vez primera, la idea de agrupar en un libro los conocimientos humanos. A comienzos del siglo XVIII eran varias las enciclopedias conocidas en Europa. Debido al interés despertado por esas publicaciones, libreros de París encargaron a los filósofos Diderot y D 'Alembert la traducción de una enciclopedia inglesa. Ante esa oportunidad, dichos pensadores concibieron la idea de redactar una obra cuyo principal objeto fuera la difusión de las nuevas ideas.

Fueron apareciendo los restantes volúmenes hasta que en 1765 se publicó el tomo 17 y la obra quedaba terminada. A estos volúmenes se añadieron 5 más de suplemento, 11 de láminas y 2 de índices. En 1780 la obra queda finalizada con un total de 35 volúmenes. La obra, ordenada alfabéticamente, contiene ya todas las características de las enciclopedias modernas, a saber, un director o coordinador, un equipo de redactores, ordenación alfabética, artículos firmados, biografía de apoyo e lustraciones. Esta es, realmente, la primera enciclopedia “moderna” y todas las posteriores (a continuación se mencionan algunas) se han basado en ella y mantienen sus características.

Los Economistas
Hasta mediados del siglo XVIII, el mercantilismo era el sistema económico imperante en Europa. En la segunda mitad de esa centuria algunos escritores, compenetrados de la filosofía ilustrada, criticaron el régimen de la época y formularon nuevas ideas relativas a la intervención del Estado en la producción y el comercio.

Los fisiócratas Recibieron ese nombre los que atribuyeron a la naturaleza un papel preponderante en la distribución de la riqueza. Trataron de demostrar la preeminencia de la agricultura sobre el comercio y la industria pues sostuvieron que sólo la tierra, la naturaleza, es la fuente del progreso económico.

Los liberales La escuela liberal, conocida tam bién con el nombre de clásica o individual, reconoce como fundador al profesor escocés Adam Smith (1723-1790). En su famosa obra titulada La riqueza de las naciones sostuvo que el trabajo, en cualquiera de sus aspectos, es la única fuente de riqueza.

Los grandes filosofos politicos
Los más destacados representantes del movimiento filosófico político del siglo XVIII fueron tres escritores franceses: Montesquieu, Voltaire y Rousseau

Barón de Montesquieu (Charles-Louis de Secondat, barón de Montesquieu; La Brède, Burdeos, 1689 - París, 1755) Pensador francés. Perteneciente a una familia de la nobleza de toga, Montesquieu siguió la tradición familiar al estudiar derecho y hacerse consejero del Parlamento de Burdeos (que presidió de 1716 a 1727). Vendió el cargo y se dedicó durante cuatro años a viajar por Europa observando las instituciones y costumbres de cada país; se sintió especialmente atraído por el modelo político británico, en cuyas virtudes halló argumentos adicionales para criticar la monarquía absoluta que reinaba en la Francia de su tiempo.

Voltaire (François-Marie Arouet; París, 1694 - 1778) Escritor francés. Figura intelectual dominante de su siglo y uno de los principales pensadores de la Ilustración, dejó una obra literaria heterogénea y desigual, de la que resaltan sus relatos y libros de polémica ideológica. Como filósofo, Voltaire fue un genial divulgador, y su credo laico y anticlerical orientó a los teóricos de la Revolución Francesa.

Jean-Jacques Rousseau (Ginebra, Suiza, 1712 - Ermenonville, Francia, 1778) Filósofo suizo. Junto con Voltaire y Montesquieu, se le sitúa entre los grandes pensadores de la Ilustración en Francia. Sin embargo, aunque compartió con los ilustrados el propósito de superar el oscurantismo de los siglos precedentes, la obra de Jean-Jacques o Juan Jacobo Rousseau presenta puntos divergentes, como su concepto de progreso, y en general más avanzados: sus ideas políticas y sociales preludiaron la Revolución Francesa, su sensibilidad literaria se anticipó al romanticismo y, por los nuevos y fecundos conceptos que introdujo en el campo de la educación, se le considera el padre del pedagogía moderna.

El movimiento filosófico francés.
Aunque la cuna de las nuevas ideas fue Inglaterra, el movimiento de renovación intelectual alcanzó en Francia su mayor florecimiento.

La primera etapa de la filo so fía ilustrada se inició durante los últimos años del reinado de Luis XIV. En principio, los hombres de letras acostumbraban reunirse en lugares públicos, llamados cafés (por la infusión que bebían), para hablar sobre temas de la época. Luego se impuso el salón, como forma de convivencia social y centro de polémica ideológica, política y literaria

Origen de las nuevas ideas
Los gobiernos absolutistas europeos habían surgido, no sólo con el apoyo de la nobleza, sino también con el beneplácito de la naciente burguesía, constituida por comerciantes y profesionales enriquecidos.

Esta clase social se tornó poderosa y entonces aspiró a participar activamente en el gobierno político de los Estados. De tal manera nació un movimiento de oposición contra el tradicional absolutismo de la época.

Las nuevas ideas liberales surgieron en Inglaterra a mediados del siglo XVIII. Allí la burguesía aprovechó los disturbios religiosos para establecer una monarquía limitada y tolerante. El médico inglés Juan Locke (1632-1704) fue el más destacado precursor de las doctrinas liberales, que posteriormente defendieron los filósofos franceses del siglo XVIII.

Las Nuevas Ideas
Hasta mediados del siglo XVIII, la organización política y social de Europa se basaba en el absolutismo, la intolerancia religiosa y la desigualdad.

PRINCIPIOS POLÍTICOS: La monarquía absoluta, basada en el derecho divino de los reyes. SOCIALES: Existía una profunda desigualdad entre los privilegiados y los no privilegiados. RELIGIOSOS: El clero era la autoridad sobre los fieles y no permitían a los ciudadanos profesasen una religión distinta de la del soberano. ECONÓMICAS: Se aplicaba el sistema mercantilista, que favorecía la exportación de productos y se oponía al libre cambio.