El problema del agua en Perú se agrava debido al cambio climático, la contaminación y la gestión deficiente de los recursos hídricos. Las sequías recurrentes, con periodos críticos en los años 1977-1978, 1992-1993, 1997-1998 y 2016-2017, han exacerbado la escasez de agua en diversas regiones del país.