Las emergencias hipertensivas se caracterizan por una elevación aguda de la presión arterial que puede llevar a lesiones graves en órganos vitales. La clasificación se divide en emergencias hipertensivas, cuando hay daño en los órganos, y urgencias hipertensivas, cuando no hay daño agudo.
Exploración general valorando: nivel de conciencia, presencia de focalidad neurológica, alteraciones del fondo de ojo, signos de edema pulmonar o anomalías cardíacas, dolor epigástrico y/o en hipocondrio derecho, presencia de hiperreflexia, grado de edema, presencia de petequias o puntos sangrantes y ECG
equipos
Como fármacos para el manejo de las emergencias hipertensivas también empleo equipos pre-hospitalarios de la gravedad clínica y del tipo de afectación orgánica asociada.
contexto
La crisis hipertensiva es una elevación aguda de la presión arterial (PA) capaz de producir lesiones en órganos diana. Según la presencia o no de esta afectación, se clasifica en emergencia hipertensiva (EH) o urgencia hipertensiva (UH), respectivamente.
medicamentos
se han empleado nitroprusiato sódico, labetalol, nitroglicerina, urapidilo, esmolol, nicardipino, enalaprilato y furosemida. La elección del fármaco antihipertensivo dependerá de la gravedad de la clínica y del tipo de afectación orgánica asociada.
fisiopatología
Las urgencias hipertensivas incluyen a los pacientes con elevación aguda de la presión arterial (PA), pero sin lesión aguda de ningún órgano diana.
características
MANEJO AMBULATORIO, TRATAMIENTO VIA ORAL, DESCANSO PROGRESIVO, TRATAMIENTO VIA PERENTRAL, MONITORISACION INTENSIVA.
signos y síntomas
Dolor de pecho intenso.
Dolor de cabeza intenso, acompañado por confusión y visión borrosa.
Náuseas y vómitos.
Ansiedad grave.
Dificultad para respirar.
Convulsiones.
Falta de reacción.
