El uso legítimo de la fuerza por parte de las autoridades está regido por varios principios fundamentales que buscan garantizar el respeto a los derechos humanos y la justicia. Las instituciones deben implementar mecanismos de supervisión y rendición de cuentas para investigar y sancionar cualquier abuso.
Las instituciones deben implementar mecanismos de supervisión y rendición de cuentas, asegurando que cualquier abuso o uso indebido de la fuerza sea investigado y sancionado adecuadamente.
Los agentes que utilicen la fuerza deben rendir cuentas de sus acciones. Esto incluye la obligación de justificar el uso de la fuerza y someterse a revisiones y evaluaciones.
Humanidad
Los agentes deben recibir formación en derechos humanos y ser conscientes de la importancia de tratar a todas las personas con respeto y dignidad.
La dignidad y los derechos humanos de todas las personas deben ser respetados en todo momento. El uso de la fuerza debe minimizar el sufrimiento y proteger la vida humana.
Imparcialidad
Los agentes deben actuar de acuerdo con principios de equidad, asegurándose de no basar sus acciones en prejuicios o estereotipos.
La fuerza debe ser utilizada de manera imparcial y justa, sin discriminación de ningún tipo.
legalidad
aplicacion
Los agentes deben estar capacitados y conscientes de las leyes que regulan el uso de la fuerza en sus respectivos países.
definicion
La fuerza debe ser utilizada conforme a la ley y dentro del marco jurídico aplicable.
Precaución
Los agentes deben ser entrenados para evaluar rápidamente la situación y elegir el nivel de fuerza adecuado
Se deben tomar todas las medidas posibles para minimizar el daño y las lesiones, tanto para los agentes como para las personas afectadas
Proporcionalidad
Aplicacion
La respuesta debe ser medida y adecuada al nivel de resistencia o amenaza, evitando el uso excesivo de la fuerza.
La fuerza empleada debe ser proporcional a la amenaza o agresión enfrentada.
Necesidad
Aplicación
Antes de recurrir a la fuerza, se deben agotar todas las alternativas posibles no violentas, como la negociación o la persuasión.
Definición
La fuerza solo debe ser utilizada cuando sea estrictamente necesaria para lograr un objetivo legítimo.