Las ondas hectométricas, que son de alta frecuencia, pueden viajar a través de la atmósfera y reflejarse en la capa Heaviside, alcanzando distancias considerables. Las ondas espaciales, en cambio, son más vulnerables a los obstáculos y se desplazan en línea recta entre antenas y receptores, recorriendo las capas inferiores de la atmósfera.