En un reino distante, un mago llamado Merlín desafió a los caballeros a encontrar un Trébol Mágico de cuatro hojas que crecería en el Bosque Encantado en seis noches. La búsqueda implicaba no solo suerte, sino también la creación de circunstancias favorables.
Nott pasó el 5º día vagando por el bosque. No quería sentirse ridículo volviendo sólo al castillo, pues le costaba mucho reconocer sus errores y siempre solía responsabilizar a los otros de sus fracasos
Sexta Regla de la Buena Suerte: Aun bajo las circunstancias aparentemente necesarias, a veces la Buena Suerte no llega. Busca en los pequeños detalles circunstancias aparentemente innecesarias…, pero ¡imprescindibles!
La Secuoya, Reina de los Árboles
Al comenzar el tercer día, Nott decidió hablar con la Secuoya: Reina de los Árboles, pues era el habitante más antiguo del Bosque, seguramente sería la única que podría desmentir lo que le habían contado hasta ahora
Quinta Regla de la Buena Suerte: Si “dejas para mañana” la preparación de las circunstancias, la Buena Suerte quizá nunca llegue. Crear las circunstancias requiere dar un primer paso…¡Dalo hoy!
La Dama del Lago
Durante el 4ª día Nott pensó que no podía fiarse del Gnomo, seguramente le engañaba así que decidió buscar a alguien que desmintiera lo que le había dicho
Cuarta Regla de la Buena Suerte: Preparar circunstancias para la Buena Suerte no significa buscar sólo el propio beneficio. Crear circunstancias para que otros también ganen atrae la Buena Suerte.
El Gnomo, Príncipe de la Tierra
Los dos caballeros emprendieron pues su viaje al Bosque Encantado. A la mañana siguiente tras llegar a su destino, Nott, decidió que su estrategia sería la de preguntar a los habitantes del bosque cuál sería el lugar donde podría nacer el trébol
Tercera Regla de la Buena Suerte: Si ahora no tienes Buena Suerte tal vez sea porque las circunstancias son las de siempre. Para que la Buena Suerte llegue, es conveniente crear nuevas circunstancias.
El Encuentro de los Caballeros en el Bosque
La última noche Nott se encontró con Sid cerca de su parcela, “cómo te va” le preguntó. Sid le contó todo lo que había hecho desde el momento en que el Gnomo le dijo que no podían crecer tréboles en el Bosque
Septima Regla de la Buena Suerte: A los que sólo creen en el azar, crear circunstancias les resulta absurdo. A los que se dedican a crear circunstancias, el azar no les preocupa.
El viento, Señor del Destino y de la Suerte
En la mañana del 6º día, nada sucedió, Sid pensó que en cualquier caso estos últimos días habían sido apasionantes y que creía haber hecho lo correcto.
Décima Regla de la Buena Suerte: Crear Buena Suerte es preparar las circunstancias a la oportunidad. Pero la oportunidad no es cuestión de suerte o azar: ¡siempre está ahí! Por tanto: Crear Buena Suerte únicamente consiste en… ¡crear circunstancias
La Bruja y el Búho visitan a Sid
Lo mismo ocurrió con Sid, pero esta vez la bruja quería que este se marchara para encontrar ella misma el Trébol Mágico, así que le contó que Merlín les había engañado y que quién arrancara el Trébol moriría a los 3 días, pero que si nadie lo arrancaba entonces sería Merlin el que moriría en su lugar
Novena Regla de la Buena Suerte: Cuando ya hayas creado todas las circunstancias, ten paciencia, no abandones. Para que la Buena Suerte llegue, confía.
La leyenda del Trébol Mágico
En un reino muy lejano, un mago llamado Merlín retó a todos los caballeros del reino a encontrar un Trébol Mágico de 4 Hojas que brotaría en 6 noches en algún lugar del Bosque Encantado
Segunda Regla de la Buena Suerte: Muchos son los que quieren tener Buena Suerte, pero pocos los que deciden ir a por ella.
El Encuentro
David y Víctor son amigos de la infancia que dejaron de verse cuando contaban con 10 años. En el momento de su reencuentro, con 64 años ya,
Primera Regla de la Buena Suerte: La Suerte no dura demasiado tiempo, porque no depende de ti. La Buena Suerte la crea uno mismo, por eso dura siempre.
El reencuentro
Al acabar el cuento, David tenía una lágrima rodando por su mejilla, estaba reflexionando sobre la enorme casualidad que suponía encontrarse con Víctor después de tantos años y que justo ahora le contara ese cuento por azar
La Bruja y el Búho visitan a Nott
Esa noche la Bruja Morgana visitó a Nott para ofrecerle un trato: matar a Merlin, a cambio de entregarle el Trébol Mágico, pues ella decía que si sabía dónde brotaría
Octava Regla de la Buena Suerte: Nadie puede venderte suerte. La Buena Suerte no se vende. Desconfía de los vendedores de suerte.