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door BEATRIZ ANCO QUISPE 1 jaar geleden

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DIFICULTADES EMOCIONALES EN NIÑOS DE 0 A 3 AÑOS

Las dificultades emocionales en niños de 0 a 3 años pueden estar profundamente influenciadas por los vínculos que establecen con sus cuidadores principales. Un entorno de cuidado adecuado es crucial para el desarrollo emocional del bebé, y la falta de estos vínculos o su inadecuación puede poner en riesgo su desarrollo.

DIFICULTADES EMOCIONALES EN
NIÑOS DE 0 A 3 AÑOS

BEATRIZ ANCO QUISPE

DIFICULTADES EMOCIONALES EN NIÑOS DE 0 A 3 AÑOS

2. La ansiedad

Reacción prolongada frente a la pérdida de seres queridos
La pérdida de alguna de las figuras parentales, fraternas o incluso de otras personas significativas genera una situación de difícil elaboración psíquica, existen casos en que las dificultades para superar esta pérdida se transforman en una problemática específica

¿cuándo podemos considerar que la reacción de un niño a una situación de duelo afecta su equilibrio y su desarrollo? Cuando, más allá de las esperables etapas de protesta, desesperación y desinterés que acompañan al duelo, se detecta que, de manera persistente y prolongada en el tiempo, el niño insiste en llamar y buscar a la persona perdida y rechaza los intentos de consuelo.

Ansiedad de separación
Existe un tipo de ansiedad específico, muy importante en los primeros años de vida, que se relaciona con la separación respecto de los cuidadores. Hay niños que muestran un temor excesivo y difícil de calmar ante personas extrañas o al separarse de aquellas de su referencia, el ingreso en un jardín maternal.
Este conjunto de problemáticas, es decir, las dificultades en el espectro de la ansiedad, deben ser consideradas cuando el niño muestra niveles excesivos de ansiedad o miedo más allá de las reacciones esperables dadas las situaciones cotidianas que lo rodean en cada momento evolutivo La ansiedad o el miedo pueden llevarlo a inhibir su conducta
No es la presencia o ausencia de angustia, su calidad o incluso su cantidad lo que permite predecir la enfermedad o el equilibrio psíquico ulterior. Lo único significativo es la capacidad del yo para dominar la angustia. Anna Freud, 1965

1. Los vínculos

Tipos de relación adulto-niño pequeño
La relación colérica-hostil se caracteriza por una interacción ruda y abrupta, a menudo carente de reciprocidad emocional. El tono de las interacciones es hostil y agresivo, hay tensión, y falta de afectos placenteros y entusiasmo.
La relación de estilo ansioso-tenso se caracteriza por interacciones tensas, restringidas, en las que casi no están presentes los afectos placenteros ni los intercambios mutuos
La relación subinvolucrada, en la que el bebé y el adulto parecen estar desligados, y en la que la conexión auténtica y espontánea entre ambos es solo esporádica, muy poco frecuente. El adulto se muestra poco sensible o no responde a las señales que ofrece el bebé
La relación sobreinvolucrada, en la que el adulto demuestra un compromiso físico y/o psicológico excesivo con el bebé, lo controla en permanencia, obstaculiza sus iniciativas, metas y deseos.
Las dificultades en el entorno, sobre todo en el modo de relación entre el niño y las personas que lo cuidan, deben ser pensadas como un problema en sí mismo y como uno de los primeros focos de atención para atender al desarrollo emocional del bebé
los vínculos que construyen con él las figuras de cuidado primario. Si estos vínculos faltan o son inadecuados, el desarrollo está en riesgo. A su vez, cuidar de un niño pequeño es una tarea esforzada que requiere que exista una red de sostén en la que los cuidadores primarios puedan apoyarse

, las carencias de cuidados en el marco de un vínculo entre el bebé y el adulto llevan a una pobreza de las interacciones, y por lo tanto, de la vida cognitiva del niño pequeño. Por otra parte, las distorsiones vinculares perturban el acceso del bebé al conocimiento de sí mismo y del entorno

Es útil esbozar el modo en que signos y problemáticas se organizan u ordenan; y cuáles son los espectros de dificultad que hay que abordar ayuda a la detección temprana de las problemáticas por parte de cualquier persona que trabaje con las familias, es fundamental para abordar los problemas y reorientar, en la medida de lo posible

Espectro, diferente de la de “trastorno" La noción de espectro abarca de modo más flexible y menos determinista una amplitud de fenómenos que incluso son diferentes en su modo de presentación y organización en función de su intensidad, su frecuencia y su duración
Es necesario tener en cuenta que realizar un diagnóstico de trastorno del desarrollo es una tarea compleja que debe estar a cargo de profesionales especializados en el tema- Trastorno que suele utilizarse para hacer referencia a las dificultades emocionales en desarrollo temprano