La formación docente abarca diversos tipos de conocimientos esenciales para la práctica educativa. Uno de ellos es el conocimiento del contenido, el cual se refiere a la comprensión profunda de las materias que los profesores enseñan.
Las teorías implícitas (Argyris y Shön, 1976, Rodrigo, 1985, Marrero, 1993, y Rodrigo, Rodríguez y Marrero, 1994, citados por Porlán y Rivero, 1998) se refieren a las teorías que son adoptadas por el profesorado sin que estos sean conscientes de que lo han hecho, ya que no se percatan de ello
Las rutinas y guiones de acción: se trata de un tipo de conocimiento que el profesorado involucra para saber qué hacer y cómo actuar ante situaciones repetitivas, concretas y desarrolladas en contextos muy específicos
Los saberes basados en la experiencia: corresponden al “conjunto de ideas conscientes que las y los profesores desarrollan durante el ejercicio de la profesión
Saberes académicos: corresponden a las concepciones disciplinares del profesorado en relación con el currículo o las ciencias de la educación