Las redes tipo malla se caracterizan por su capacidad de elegir rutas óptimas para la transmisión de datos. Para evaluar su eficiencia y calidad, se utilizan diversas métricas. El conteo de saltos y la métrica ETX se enfocan en la pérdida de paquetes y se prefieren para enlaces más largos, mientras que ETT estima el tiempo promedio de transmisión, siendo particularmente útil en tramos con pasarelas.