La psicología del consumidor se remonta a principios del siglo XX, con J. B. Watson como una de las figuras clave. Watson desarrolló campañas basadas en la manipulación de las emociones fundamentales:
Para vender un producto a los consumidores se les debe decir algo relacionado con el miedo, que provoque cierta ira, que genere una respuesta de afecto, amor, o un ataque a una necesidad psicológica
Watson creó diversas campañas alrededor de temas derivados de sus investigaciones sobre las tres emociones básicas:
miedo, ira y amor
La investigación del comportamiento de las personas frente a los productos y servicios se remonta a los inicios del siglo XX y J. B. Watson es uno de sus principales precursores.
Estudios sociales sobre el consumo
Lógicas sociales del consumo
Lógica de la novedad. Se expresa como su nombre indica, en la búsqueda por parte de los consumidores de nuevos espacios, practicas, productos por el mero hecho de percibirse como nuevos.
Lógica de la diferencia. Habitualmente se expresa en la imagen particular proyectada por el consumo de uno u otro tipo de marca, de servicio en el marco de un sistema de signos, de un sistema de marcas o de servicios existente en un determinado ámbito de consumo.
Lógica de la distinción. Habitualmente asociada al acceso, al uso y consumo de algún producto, marca, actividad, de carácter minoritario en el conjunto social.
El consumidor
Las emociones: un control social
Las emociones se viven como la posibilidad de trascender momentáneamente la jerarquía y las normas, como un respiro en el control y la regulación
Gestionarlas es la propia vida, de la que se ocupa cada cual
Las emociones que experimentamos como parte natural de nuestra rutina diaria, difícilmente las cuestionamos
La libertad de comprar
También forma parte de nuestro interior, de nuestras emociones y de nuestros deseos más íntimos, y de nuestras necesidades psicológicas más básicas
Es tan importante el consumo, que no solo forma parte de nuestra vida cotidiana