av Adriana Ordoñez 6 måneder siden
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Mer som dette
La visión de la historia como algo universal y sistemático ha existido en diversas culturas antes del cristianismo, aunque algunas particularidades puedan haber surgido con éste.
Los autores proponen que la historia debe ser entendida como un proceso con una razón de ser y una finalidad que van más allá de la simple cronología de eventos.
Las visiones de San Agustín, Vico, Voltaire y Hegel ofrecen diferentes interpretaciones sobre la razón y el desarrollo de la historia, destacando la importancia de encontrar un sentido subyacente.
Cada autor aporta una perspectiva única sobre la finalidad de la historia, pero todos coinciden en la necesidad de darle un sentido integral y comprensivo.
Las diferentes visiones históricas muestran cómo la historia puede ser entendida como una combinación de eventos y procesos que buscan una razón y una finalidad, integrando lo temporal y lo eterno.
San Agustín considera que la historia es teológica, con eventos como la Creación, la Caída y la Redención definiendo la realidad histórica, en contraste con otras concepciones históricas que se abordarán en el texto.
Las diferencias fundamentales entre las visiones de San Agustín, Vico, Voltaire y Hegel radican en sus enfoques sobre la ley que rige la historia y su finalidad.
Las distintas concepciones de la historia difieren en cómo consideran la razón de ser de la historia, ya sea divina, humana o impersonal.
La historia universal tiene una ley que afirma su plena realidad y justificar la historia va más allá de explicarla, buscando una finalidad que conecta con la imaginación.
La pregunta sobre la finalidad de la historia es compleja y lleva a nuestros autores a utilizar la imaginación para encontrar sentido más allá de la mera explicación histórica.
La historia es una búsqueda constante de la plenitud y la coexistencia de lo real y lo eterno, donde la salvación del hombre integra lo efímero y lo duradero.
El sentido de la historia se encuentra en una realidad que justifica y mantiene su presencia, siendo diferentes para cada autor, pero con un común objetivo de darle sentido a la historia.
A pesar de sus diferencias, San Agustín, Vico, Voltaire y Hegel coinciden en que la historia tiene una ley propia que la rige, distinta a la ley de la naturaleza o el mundo inteligible.
Polibio sentó los fundamentos de lo que llamamos visión de la historia.
Segundo, estableció bases para un tratamiento sistemático de la historia.
Primero, tuvo presente una totalidad
Estas plantean problemas
De la finalidad de la Historia
De la razón de ser de la Historia