El Acento Prosódico, El Acento Gráfico y La Tilde Diacrítica
EL ACENTO PROSÓDICO
Cuando se pronuncia cualquier palabra española formada por varias sílabas, se percibe que no todas las sílabas se emiten con la misma intensidad, que una de ellas destaca sobre el conjunto y resulta más perceptible que las otras.
Palabras tónicas o acentuadas
Son las que contienen una sílaba tónica. Entre ellas están los sustantivos, los adjetivos, los verbos, casi todos los adverbios, los pronombres personales tónicos, los demostrativos, los interrogativos y los exclamativos, los indefinidos o las interjecciones.
Son las que contienen una sílaba tónica.
Son aquellas que en la cadena hablada se pronuncian sin acento. Destacan entre ellas los artículos determinados, los pronombres personales átonos, los posesivos antepuestos, la mayoría de los relativos, las conjunciones y las preposiciones (excepto según y vía).
CLASES DE PALABRAS SEGÚN LA POSICIÓN DEL ACENTO
Agudas
Llevan el acento prosódico en la última sílaba:
bonDAD, consideRAR, caFÉ, adeMÁS, funCIÓN
Llanas o Graves
La sílaba tónica es la penúltima:
RESta, calleJEros, HAcen, iNÚtil, aZÚcar.
Esdrújulas
El acento recae en la antepenúltima sílaba:
esPÍritu, MÓdulo, oLÍMpico, contempoRÁneo.
Sobresdrújulas
Llevan el acento en una sílaba anterior a la antepenúltima. Se trata únicamente de palabras compuestas por formas verbales y pronombres enclíticos:
prePÁranoslos, leYÉNdosela, DÍgannoslo, imaGÍnatela, imaGÍnatemela.
LA TILDE O ACENTO GRÁFICO
La tilde o acento gráfico es un signo en forma de rayita oblicua (´) que, colocado sobre una vocal, indica que la sílaba a la que esta pertenece es tónica, es decir, se pronuncia con mayor relieve que las otras
LAS REGLAS DE LA ACENTUACIÓN GRÁFICA
ACENTUACIÓN GRÁFICA DE LAS PALABRAS MONOSÍLABAS
Las palabras de una sola sílaba no se acentúan en español, con excepción de las que llevan tilde diacrítica ( La tilde diacrítica en palabras monosílabas)
bien, con, di, dio, fue, fui, mes, sal, tan, ti, vio.
ACENTUACIÓN GRÁFICA DE LAS PALABRAS POLISÍLABAS
El uso de la tilde en las palabras formadas por varias sílabas está condicionado por la posición del acento prosódico, es decir, por el hecho de que sean agudas, llanas, esdrújulas o sobresdrújulas.
Acentuación de las palabras agudas
. Las palabras agudas llevan tilde cuando terminan en las vocales a, e, i, o, u, o en n o s no precedidas de otra consonante:
acá, comité, colibrí, magrebí, revisó, iglú, razón, compás.
Cuando terminan en consonante distinta de n o s: actriz, amistad, escribir, relax, reloj, trigal. Cuando terminan en más de una consonante: esnobs, mamuts, minigolf, roquefort, zigzags. • Cuando terminan en y: convoy, guirigay, virrey.
Acentuación de las palabras llanas
Las palabras llanas se escriben con tilde en los siguientes casos: • Cuando terminan en consonante distinta de n o s:
dólar, lápiz, referéndum, Tíbet, tórax, túnel.
• Cuando terminan en más de una consonante:
bíceps, cíborg, clárens, fórceps, récords, wéstern.
• Cuando terminan en y: yóquey, yérsey.
No llevan tilde, por tanto, cuando terminan en n o s no precedidas de otra consonante, o en vocal:
margen, crisis, lata, parque, bici, libro, tribu.
Acentuación de las palabras esdrújulas y sobresdrújulas
Las palabras esdrújulas y sobresdrújulas se escriben siempre con tilde:
análisis, cóselo, hábitat, rápido, recítenoslo, llévesemelas.
El cambio de singular a plural puede modificar la posición del acento prosódico y, en consecuencia, condicionar la acentuación gráfica. Así, palabras como examen, imagen, joven, margen u origen no llevan tilde por ser llanas acabadas en n. Sí la llevan, en cambio, sus plurales, por ser palabras esdrújulas: exámenes, imágenes, jóvenes, márgenes, orígenes.
PALABRAS CON SECUENCIAS VOCÁLICAS
La mayor parte de las sílabas en español contienen una sola vocal. Sin embargo, algunas incluyen secuencias de dos y hasta tres vocales. Así, en la palabra cien, las vocales i, e se articulan en la misma sílaba, dando lugar a un diptongo; en buey, son tres las vocales que forman el núcleo de la sílaba, u, e, y, originando un triptongo.
En otros casos, las vocales que forman las secuencias pertenecen a sílabas distintas, dando lugar a un hiato, como en pa.ís o Ja.én.
Diptongo
Secuencia de dos vocales que pertenecen a la misma sílaba: au.la, es.toy, deu.da, vier.nes.
Triptongo.
Secuencia de tres vocales que pertenecen a la misma sílaba: buey, cam.biáis, miau.
Hiato
Secuencia de dos vocales que pertenecen a sílabas distintas: fe.o, ha.bí.a, o.í.do, pun.tú.a.
LA TILDE DIACRÍTICA
La tilde diacrítica se utiliza para diferenciar en la escritura ciertas palabras con la misma forma, pero distinto valor, que se oponen entre sí por ser una de ellas tónica y la otra átona.
La tonicidad o atonicidad con que se pronuncia cada una de esas palabras se asocia, normalmente, a la categoría gramatical a la que pertenece. Así, la forma verbal dé, con tilde diacrítica, es, como todos los verbos, una palabra tónica, mientras que la preposición de, que no lleva tilde, es átona, como casi todas las preposiciones
CARACTERÍSTICAS Y CONDICIONES DE SU USO
El número de sílabas
La mayoría de las palabras que se escriben con tilde diacrítica son monosílabas y solo unas cuantas son polisílabas, como los interrogativos y exclamativos cuáles, quiénes, cómo, cuánto, cuándo y (a)dónde, que pertenecen a la misma clase que los interrogativos y exclamativos monosílabos qué, cuál, cuán, quién.
Uso al margen de las reglas
Todas las voces que se escriben con tilde diacrítica no deberían llevarla según las reglas generales de acentuación, bien por tratarse de monosílabos (él, dé, sí, quién...), bien, en el caso de las polisílabas, por ser palabras llanas acabadas en vocal o en s (cómo, dónde, cuándo, quiénes...).
Uso asistemático y excepcional
La tilde diacrítica no se aplica de manera sistemática a todas las palabras que en español se oponen por ser tónicas a otras idénticas de pronunciación átona. Así, hay en el léxico español numerosos pares de voces, monosílabas y polisílabas, que cumplen dicha condición en los que no se recurre al acento gráfico. Por ejemplo:
don (sustantivo, tónica)/don (tratamiento de cortesía, átona);
la (nota musical, tónica)/la (artículo, átona);
sobre (sustantivo, tónica)/sobre (preposición, átona);
entre (forma verbal, tónica)/entre (preposición, átona).
Función facilitadora
Las pocas palabras que se escriben con tilde diacrítica tienen en común ser de uso frecuente, lo que explica que el sistema ortográfico haya considerado pertinente incluirlas en esa lista, aun yendo en contra de las reglas generales, a fin de facilitar su identificación rápida en la lectura y en la escritura.
USOS QUE NO CORRESPONDEN A LA TILDE DIACRÍTICA
En ocasiones hay cierta tendencia a utilizar la tilde para distinguir pares de palabras de igual forma y distinto significado que siempre son tónicas, lo cual no corresponde a la tilde diacrítica, cuya función, como ha quedado dicho, es la de distinguir palabras tónicas y átonas. Se trata de casos como
di (del verbo decir) y di (del verbo dar);
ve (del verbo ir) y ve (del verbo ver);
fue, fui (del verbo ir) y fue, fui (del verbo ser);
sal (del verbo salir) y sal (sustantivo).
LA TILDE DIACRÍTICA EN SOLO Y LOS DEMOSTRATIVOS
La palabra solo, tanto cuando es adverbio y equivale a solamente (Solo le interesa el deporte) como cuando es adjetivo (Está muy solo), así como los demostrativos este, ese y aquel, con sus femeninos y plurales, funcionen como pronombres (Esta es la casa; Compra ese) o como determinantes o adjetivos (aquellas chicas, el niño este), no deben llevar tilde según las reglas generales de acentuación, bien por ser palabras llanas terminadas en vocal o en s, bien, en el caso de aquel, por ser aguda y acabar en consonante distinta de n o s.
Cuando, formando parte de determinados enunciados, existía riesgo de ambigüedad en su interpretación, estas palabras se escribían con tilde en su uso adverbial en el caso de solo y en su uso pronominal en el caso de los demostrativos:
Estaré sólo un mes (‘solamente un mes’); Estaré solo un mes (‘yo solo, sin compañía’);
¿Para qué trajeron aquéllos medicamentos? (aquéllos es el sujeto de la oración); ¿Para qué trajeron aquellos medicamentos? (aquellos acompaña al sustantivo medicamentos).
Sin embargo, dado que estas voces son siempre tónicas, la tilde diacrítica no cumple en ellas la función de distinguir formas tónicas de átonas que caracteriza todos sus usos. Por ello, pueden escribirse sin tilde en todos los casos, ya que las posibles ambigüedades son resueltas sin dificultad por el propio contexto.
LA TILDE DIACRÍTICA EN PALABRAS MONOSÍLABAS
CONSIDERACIONES GENERALES
Según las reglas generales de acentuación, los monosílabos no llevan tilde. Constituyen una excepción a esta regla ciertas palabras monosílabas tónicas de uso frecuente que se oponen a otras formalmente idénticas, pero de pronunciación átona. Para diferenciar gráficamente estos pares de monosílabos, se prescribe la utilización de la tilde diacrítica en el elemento tónico del par.
MONOSÍLABOS CON TILDE DIACRÍTICA
La siguiente relación incluye la mayoría de ellos. Los que faltan pertenecen al grupo de los interrogativos, exclamativos y relativos, que se estudian en las Qué, cuál, quién, cómo, cuán, cuánto, cuándo, dónde y adónde, con tilde y Que, cual, quien, como, cuan, cuanto, cuando, donde y adonde, sin tilde.
tú (pronombre personal): Tú no digas nada;
tu (posesivo): ¿Dónde está tu casa?;
él (pronombre personal): Él lo ha visto todo;
el (artículo): El cartero ya vino;
mí (pronombre personal): Hazlo por mí; Solo dependo de mí mismo;
mi (posesivo): Olvidé mi sombrero;
mi (nombre de nota musical; sigue las reglas generales): Empieza en mi sostenido;
sí (pronombre personal): Está orgullosa de sí misma;
sí (adverbio de afirmación): Sí, lo haré;
sí (sustantivo, ‘asentimiento’): En el referéndum, triunfó el sí;
si (conjunción, con distintos valores): Si no lo encuentras, dímelo; Pregúntale si quiere ir; Si vos no venís, avisame; Pero ¡si yo no lo sabía!; Si será bobo...;
si (nombre de nota musical; sigue las reglas generales): La obra está en si bemol.
Es incorrecto escribir el pronombre personal ti con tilde por analogía con los pronombres mí y sí, dado que no existe ningún monosílabo átono de igual forma del que deba distinguirse: ¿A ti no te gusta?; Tienes que hacer las cosas por ti mismo.
té (sustantivo, ‘planta medicinal’, ‘infusión o bebida’): Desayuno té con leche;
te (pronombre, con distintos valores): Ayer no te vi en la reunión; ¿De qué te arrepientes?; te (nombre de letra; sigue las reglas generales): Escribió una te mayúscula.
El plural del sustantivo té mantiene la tilde diacrítica del singular: He probado muchos tés.
dé (forma del verbo dar): Dé gracias a que estoy de buen humor;
de (preposición): Vienen de lejanos países;
de (nombre de letra; sigue las reglas generales): Borra esa de;
sé (forma del verbo ser): Sé más discreto, por favor;
sé (forma del verbo saber): Ya sé cómo se llama;
se (pronombre, con distintos valores): ¿Se lo trajiste?; Luis se preparó la comida; Solo se han visto una vez; Siempre se queja por todo;
se (indicador de impersonalidad y de pasiva refleja): Aquí se trabaja mucho; Se hacen trajes a (la) medida;
más (cuantificador): Ana vive más lejos que tú; Cada vez tiene más canas; Es de lo más refinado; más (conjunción con valor de suma): Seis más cuatro, diez;
más (en la locución conjuntiva más que, ‘sino’): No habla más que de ella;
más (sustantivo, ‘signo matemático’): Coloca el más entre las cifras;
mas (conjunción adversativa, ‘pero’): Me creyeron, mas solo después de verlo.
LA ACENTUACIÓN GRÁFICA DE AÚN / AUN
El adverbio aún es normalmente tónico y bisílabo, y debe escribirse con tilde en aplicación de las reglas generales de acentuación gráfica cuando corresponde a todavía, bien con valor temporal (Después de tanto tiempo, aún sigue esperando), bien con valor ponderativo (Quedó en segundo lugar y aún se queja).
Cuando se utiliza con el mismo sentido que hasta, incluso, también, (ni) siquiera: Aprobaron todos, aun los que no estudian nunca; Ni aun de lejos se parece a su hermano.
• Cuando, con valor concesivo, equivale a aunque o a pesar de que: Aun siendo malos datos, hay esperanza de mejora; Te darán el premio aun cuando no lo quieras.