El Coronel No Tiene Quien Le Escriba

Historia se genera despues de la guerra civil

Guerra que dejo como consecuencia:
- Perdida de riquezas y hogares
-La perdida de Panamá y
-La creación de los grupos armados

El Coronel

Fue parte de esta guerra, a la edad de 20 años fue dado de baja por el fin de esta misma

Cuando salio del ejercito se convirtió en

Un hombre caracterizado por una paciencia invadida de una actidud tan terca como la de un burro

El coronel vivía con su mujer y su gallo, herencia de su hijo, asesinado precisamente en una gallera

La mujer

Entregada a su casa y familia, su paciencia no dió para más, odio hacia el gallo, siempre le decia a su esposo que lo vendiera, que se deshiciera de ese animal

Se le prometió el reconocimiento de su jubilacion (pensión)

Desde allí se manifiesta mas su paciencia

Comenzó a ir al muelle todos los viernes de correspondencia, sin falta

En este punto crece su decepción viernes tras viernes

En un instante se le escuchó decir "me pelé el cuero por esta patria y no hay ni una mínima muestra de agradecimiento hacia eso"

Ya 40 años de esperar la carta

Sin un peso, su mujer enferma de asma y sin comida para el gallo

Su mujer empieza a sentir odio hacia el gallo

El gallo, considerado el mejor del departamento, situación por la cual fue importante para el coronel

Sus dias nunca fueron diferentes y menos los viernes, unos de tantos viernes, el médico, en presencia del coronel, le dijo al cartero "Nada para el coronel" y el cartero respondió "El coronel no tiene quien le escriba"

Al final...
Sin carta, sin pensión, sin pesos en el bolsillo, su casa hipotecada el coronel solo decia: cuando el gallo comience a pelear nos traerá mucho dinero, mientras tanto esperar – su mujer dijo - el gallo nos llevará a la ruina – y de un solo salto el coronel replicó – no, el gallo va a ganar – Y si pierde – con voz seria dijo la mujer - No va a perder – insistió el coronel, su mujer voltea, lo mira muy tajante, tanto como al gallo y dice - pero has pensado en la posibilidad de que pierda – el coronel pensó y en un instante dijo – Mierda!