Reglamento Interno
Es el instrumento por medio del cual el empleador regula las obligaciones y prohibiciones a que deben sujetarse los trabajadores
Que debe contener el reglamento interno
Las horas en que empieza y termina la jornada de trabajo y las de cada turno.
Los descansos.
Los diversos tipos de remuneración; el lugar, día y hora de pago.
Las personas a quienes los trabajadores deben dirigir sus reclamos, consultas y sugerencias.
La forma de comprobación del cumplimiento de las normas previsionales y laborales.
Las normas e instrucciones de prevención, higiene y seguridad,
Las sanciones que se puedan aplicar a los trabajadores con indicación de las infracciones y el procedimiento a seguir en estos casos
Importancia
El reglamento interno de trabajo es un archivo de suma trascendencia en toda organización, ya que se convierte en regla reguladora de las interrelaciones internas de la compañía con el trabajador. Es un instrumento imprescindible para solucionar los conflictos que se llegaren a exponer en la organización, y es tan fundamental que si no existiera, podría ser bastante difícil sancionar a un trabajador por cualquier acto impropio, pues no habría ni una sustentación normativa o regulatoria que ampare una elección sancionatoria.
Objetivos
a) Fortalecer el orden laboral y la educación de los trabajadores.
b) Enfrentamiento a las indisciplinas e ilegalidades en ocasión del desempeño laboral.
c) Coadyuvar al mismo tiempo a formar una elevada conciencia jurídica-laboral de los trabajadores
Ámbito de aplicación
a) A todo el personal que se encuentra ocupando plazas por:
Contratos indeterminados.
Contratos determinados en el tiempo de urgencia del contrato.
b) A dirigentes, funcionarios y demás trabajadores designados.
c) Recién graduados en adiestramiento.
Obligación del reglamento
En el caso de que una empresa esté obligada a tener Reglamento Interno y carezca de él, puede ser sancionada con multa administrativa por el Inspector del Trabajo
Algunos puntos clave para la confección de este tipo documento
Establecer los límites del comportamiento laboral.
Dividir de manera clara y concreta las funciones y responsabilidades de todos.
Declarar derechos, deberes, incentivos y sanciones.
Promover la armonía entre el empleador y los empleados.
Proponer diversas opciones en cuánto a la resolución de conflictos.
Establecer reuniones periódicas.