Alsina, Bautista
FEC
El Cabildo Correntino
1905
Se dio la demolición del cabildo correntino
1824
Desde ese año, al desaparecer el Cabildo como Institución, lo ocupó la Cámara Legislativa, hasta su demolición en 1905.
Hasta su demolición, ya como sede del poder legislativo, fue objeto de refacciones y ampliaciones en diferentes oportunidades.
1823
Se le realizaron ampliaciones significativas (Calabozos).
1816
Se termina la torre, y en 1817 el edificio estaba concluido y en uso.
1813
Se comienzan las edificaciones
El edificio previsto, era muy parecido a los Cabildos de Luján y Santa Fe en lo que hace a los principales elementos
Con altibajos, en las obras trabajan indios de Itatí, Saladas y Santa Lucía.
1812
Con el apoyo del Teniente de Gobernador Toribio de Luzuriaga, se reinician las gestiones para alzar un edificio conveniente.
Ese mismo año, el Tte. De Gdor. Eusebio Valdenegro insiste sobre la necesidad de tener una cárcel, señalando que tiene tomada la casa de José Simón García de Cossio, que la ha cedido, en la esquina de la plaza (Mayo y Salta), para alojar reos “criminales” que está procesando.
Se abre un registro de donativos para el Cabildo y cárcel pública.
1803
Se ensanchan los terrenos del Cabildo mediante acuerdos hechos con los vecinos Beláustegui y Portillo.
1797
El Cabildo, opuesto a la Junta de Temporalidades, brega nuevamente para poder disponer de los materiales de los Jesuítas
La ciudad aduce sistemáticamente su pobreza como justificación de sus pedidos.
Hacen hincapié en la necesidad de disponer de cárcel para garantizar el orden público
Ese mismo año, se termina de demoler la Iglesia de los Jesuítas, pero el pleito no se resuelve. Parte de los materiales fue subastada, y otra robada por los vecinos
1794
El Cabildo reitera sus solicitudes en un largo memorial al Virrey, que le es enviado junto con documentos relacionados al caso.
También se designa un apoderado en Buenos Aires para que haga el seguimiento de las gestiones
1791
Nuevamente el Cabildo intenta obtener apoyo de los vecinos
1790
En 1790, el Cabildo solicita en donación los materiales que pertenecieran a los Jesuítas, tanto a Paula Sanz como a la Junta Superior de Temporalidades
1787
En 1787 se solicita ayuda económica a Buenos Aires. El gobernador intendente Francisco de Paula Sanz, ordena que le remitan un proyecto. Realizado éste por Miguel de Ávila, alarife reconocido
Cuando el Cabildo intenta seguir el rastro de los materiales ya acopiados, descubre que lo que no se destruyó fue robado o presuntamente utilizado en otras edificaciones
En los años posteriores, los vecinos siguen hurtando las maderas de las ruinas del Cabildo
1770
Una comisión de alarifes dictamina que el viejo Cabildo es inhabitable.
Juan Bautista Eizaguirre y Juan José Díaz López, los peritos, presentan un proyecto de edificio, de adobe con estructura de horcones y tirantes de madera.
El gran problema es la falta de medios, de manera que por largo tiempo el Cabildo funciona en el antiguo Colegio de los Jesuítas
1767
Son expulsados los Jesuítas y queda deshabitado su Colegio. Son las mejores edificaciones de la ciudad, y el Cabildo, cuyo edificio una vez más amenaza ruina
1728
El edificio carece de puertas y ventanas
1716
El edificio reparado presta servicios hasta ese año, y ya se necesitan nuevas grandes reparaciones
1704
El Cabildo se derrumba
Ese mismo año, Gabriel de Toledo emprende la reparación, a partir de dos cuartos que han quedado.
1662
Mientras se realizan las obras, el Cabildo sesiona en la casa del Capitán Sebastián Crespo Flores
A fines de est mismo años, el edificio está reparado, y prestará funciones hasta comienzos del siglo XVIII.
1661
Nuevamente en ruinas y se solicita otra vez el aporte vecinal. Se hace una “derrama” (colecta) de palmas entre los vecinos
1641
Recién en este año se alzó el edificio, que ya en 1649 amenaza ruina
1638
con indios de los vecinos y de Itatí, se comienza a alzar un nuevo edificio, de tapias y techo de palma
1637
Para ese año, hay constancias de que el edificio se había derrumbado
1634
el edificio fue construido porque hay constancias de que se hallaba en mal estado.
1605
Procurador General Bernabé Delgado pidió un terreno
