En 1990, se implementó el Boletín B-10 para reconocer los efectos de la inflación en la información financiera, requerimiento que llevó a la presentación de estados financieros a pesos constantes.
La importancia del Estado Flujo de Efectivo radica en dar a conocer a los interesados y usuarios de la información financiera, el impacto e importancia de las operaciones de la Entidad en la generación y
aplicación del efectivo generado en un periodo determinado,
Esta Norma de Información Financiera (NIF) tiene como objetivo establecer las normas generales para la presentación, estructura y elaboración del estado de flujos de efectivo, así como para las revelaciones que complementan a dicho estado financiero básico.
En el caso de los
flujos derivados de intereses cobrados y dividendos deben de representarse en un rubro específico
dentro del mismo grupo de actividades en las que se presentan los flujos de efectivo de la partida con la que estén asociados.
La NIF B-2 exige en el apartado de revelación que todo lo referente o en relación al efectivo, se haga en
notas del balance general respecto a la integración de dichos saldos. La entidad debe incluir los rubros e
importes de inversiones a la vista que forman parte de dicho efectivo y equivalentes de efectivo.
La NIF B-2 vuelve a comentar sobre la entidad en un entorno no inflacionario los estados de flujo de esta naturaleza de periodos anteriores deben presentarse expresados en valores nominales.
Se eliminan los flujos de
efectivo que ocurrieron en el periodo entre las entidades legales que forman parte de la entidad económica que consolida, podemos ejemplificar las operaciones intercompañías relacionadas en lo correspondiente a las aportaciones de capital y dividendos pagados.
En el Estado de flujos de efectivo debe determinarse la suma algebraica de los flujos de efectivos presentados en
los rubros de actividades de operación
y actividades de inversión
Si este resultado es
positivo se le denomina efectivo excedente para aplicar en actividades de financiamiento y se es
negativo, se le denomina efectivo a obtener de actividades de financiamiento
Parte de la utilidad antes de impuestos y se ajusta por los efectos de operaciones de periodos anteriores cobradas o pagadas en el periodo actual, sean estas de inversión o financiamiento.
Cualesquiera otras partidas cuyos efectos monetarios se relacionen con inversión o financiación.
Las partidas sin reflejo del efectivo, como depreciación, provisiones , impuestos diferidos,
ingresos acumulados (o devengados) ( gastos), no recibidos (pagados) todavía en efectivo,
pérdidas y ganancias de cambio no realizadas , participación de ganancias no distribuidas de asociadas y participaciones no controladas.
Los cambios durante el periodo de los inventarios y en los derechos por cobrar y las obligaciones
por pagar de las actividades de operación
En el año de 1990 entró en vigor, como parte del Boletín B-10, Reconocimiento de los efectos de la inflación en la información financiera, el Tercer Documento de Adecuaciones al Boletín B-10, requiriendo a las entidades la presentación de sus estados financieros básicos a pesos de poder adquisitivo del cierre del periodo que se informa, es decir, a pesos constantes.
Como consecuencia de lo anterior, en el mismo año, entró en vigor el Boletín B-12
Esta Norma fue Emitida por el Consejo Mexicano de las Normas de Información (CINIF) el 01 de noviembre del 2007 y entro en vigor desde el 01
de enero del 2008, la cual NIF B-2 sustituyo al Boletín B-12
Presentar por separado cobros y pagos en términos brutos (actividades de operación, inversión o financiamiento)
Ajustando las ventas, el costo de ventas y otras partidas en el estado de resultados integral