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av Fanny Varela för 1 år sedan

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Propiedad intelectual y plagio en trabajos académicos y profesionales.

El plagio académico es un tema controvertido que puede resultar en sanciones disciplinarias dentro de los ámbitos universitarios y científicos, aunque no siempre constituya un delito penal o civil.

Propiedad intelectual 
y plagio en trabajos académicos y profesionales.

STEPHANIA VARELA CORONA

Propiedad intelectual y plagio en trabajos académicos y profesionales.

VI. Obligaciones del buen hacer académico e inadmisibilidad del plagio

Las exigencias y responsabilidades propias de la tarea académica incluyen el respeto a la autoría de las ideas ajenas, cuidado y previsión que son requeribles en todo buen hacer científico o universitario.

VII. El “derecho de cita” y el “uso honrado” de las fuentes

Los fines para este uso honrado, es que las utilizaciones de las obras ajenas deberán mencionar en cada caso el trabajo y el nombre del autor.
El reconocimiento del derecho de cita tiene por objeto alcanzar un equilibrio entre los derechos de exclusividad de los autores.

VIII. Respetar la integridad de las ideas ajenas y no tergiversarlas

Hay que ser muy cuidadoso al tomar ideas ajenas, interpretarlas o parafrasearlas, siempre respetando delicadamente la integridad y sentido de la obra que se cita.

IX. Cuestiones éticas en relación con la autoría de los trabajos científicos

Cuidar diligente y minuciosamente los modos usuales de reconocer la autoría de las distintas ideas, escritos y publicaciones.

X. El respeto a la autoría en monografías y exámenes universitarios

En todo trabajo de investigación solicitado a estudiantes universitarios debe exigirse: Una elaboración y planteamiento original, y la rigurosa consigna de las fuentes.

XI. Derecho de autor y escritos profesionales del abogado

No es necesario que se cite en todo caso la fuente de cada idea.
En los escritos profesionales del abogado las exigencias son diferentes a las relativas a los trabajos académicos.

XII. Propiedad intelectual y escritos realizados por jueces y magistrados

El trabajo de un juez es sentenciar; no escribir artículos de doctrina.
Muchos jueces y tribunales tienen por uso y costumbre el no citar a los autores que han utilizado para nutrir sus razonamientos y decisiones.

V. Plagio sustancial y “excepción de insignificancia”

Hay que poner una cita que tenga un “en el mismo sentido…”, o “en sentido concordante…”, para indicar que existe otro autor que de manera independiente con anterioridad ha pensado lo mismo.
Podría admitirse que por algún error o inadvertencia, alguien pase por alto alguna cita pertinente, olvidando consignar la fuente de alguna idea entre decenas de páginas,
El plagio académico es importante y sustancial tanto cuando hay una apropiación significativa de las ideas o escritos de otro.

IV. El “plagio académico” es reprochable aun cuando no siempre sea un ilícito civil o un delito penal

El plagio académico puede dar lugar a sanciones disciplinarias en el ámbito universitario o científico.

III. Modalidades del plagio en trabajos científicos

Apropiación de ideas en escritos universitarios, así como los trabajos académicos destinados a la sola lectura por el profesor.
Apropiación de fracciones de una o de varias obras ajenas, de materiales de distintos autores, presentando diferencias que procuran ocultar o disimular el hecho.

II. El plagio en escritos académicos

"Plagiar" Significa tomar o apropiarse de aspectos u elementos elaborados por otro, e insertarlos en la obra como si fueran realizados por uno mismo.
Todo trabajo científico tiene determinadas características esenciales.
Dentro de ellas se encuentran la calidad y eventual novedad u originalidad.
Debe respetarse la autoría ajena de las ideas.

I. Hacer justicia a la propiedad ajena e importancia actual de la cuestión del plagio.

La negación del respeto al trabajo y las ideas ajenas infortunadamente llega en formato de plagio.
Un uso descuidado o incorrecto del sistema de citas entorpece la necesaria distinción entre la reflexión propia del autor y el aporte de las fuentes que ha utilizado.
Valorar la trascendencia de un primer consejo.
Cuidar delicadamente a no apropiarse de ninguna manera de la propiedad intelectual de los autores utilizados para la elaboración del escrito que se presenta.
Debe dejarse constancia expresa y exacta de todas las opiniones ajenas tomadas como base para su elaboración.