A principios del siglo XX, Europa fue testigo de una serie de tensiones y rivalidades que culminaron en la Primera Guerra Mundial. La descomposición de imperios y la búsqueda de expansión territorial por parte de los nuevos estados condujeron a conflictos como las Guerras Balcánicas.
Soldados franceses en las trincheras, durante la batalla de Verdún, en 1916.
Soldados británicos en las trincheras, durante la batalla del Somme, 1916.
Cañones serbios capturados por los austríacos.
1ª Guerra Mundial
Contendientes
Como resultado de estas tensiones, se crearon vastos sistemas de alianzas a partir de 1882:
La Triple Alianza: Alemania, Austria-Hungría e Italia.
La Triple Entente: Francia, Reino Unido y Rusia.
Consecuencias
Todos los jóvenes países nacidos de su descomposición buscaron expandirse a costa de sus vecinos, lo que llevó a dos conflictos entre 1910 y 1913, conocidos como Guerras Balcánicas.
Mientras tanto, los países de los Balcanes independizados del Imperio Otomano fueron objeto de rivalidad entre las grandes potencias.
La III República perdió Alsacia y Lorena, que pasaron a ser parte del nuevo Reich Germánico.
El rápido ascenso del Imperio Alemán hizo que los dos países se unieran a través de la Entente cordiales.
El Reino Unido y Francia, las dos principales potencias coloniales, se enfrentaron en 1898 y 1899.
Durante la segunda mitad del siglo XIX y los inicios del siglo XX se produjo el reparto colonial de África.
Antecedentes
concluyó con la creación del primer Estado autodenominado socialista de la historia, la Unión Soviética.
Al calor de la Primera Guerra Mundial también se fraguó la Revolución Rusa.
La firma de un acuerdo de paz entre la Rusia revolucionaria y las Potencias Centrales tras la célebre Revolución de Octubre.
La guerra empezó su desenlace en marzo de 1917 con la caída del gobierno ruso tras la Revolución de Febrero.
Por otro lado se encontraba la Triple Entente, formada por el Reino Unido, Francia y el Imperio Ruso.
Por un lado se encontraba la Triple Alianza, formada por las Potencias Centrales: el Imperio Alemán y Austria-Hungría.
Los países en guerra firmaron el Tratado de Versalles.
Comenzó el 28 de julio de 1914 y finalizó el 11 de noviembre de 1918.
