La cultura Wari fue un importante imperio andino que se extendió desde el sur, alcanzando Moquegua, hasta el norte, llegando a La Libertad. Su capital se ubicaba en el departamento de Ayacucho y se destacó por sus manifestaciones culturales y artísticas, especialmente en la arquitectura con sitios como Pikillacta en Cusco y Willkawain en Ancash, así como en la cerámica con tazones ceremoniales, vasijas y cántaros.