La publicidad cumple varias funciones clave en nuestra sociedad moderna. Primero, actúa como una fuente de financiamiento esencial para los medios de comunicación, permitiendo que diarios y revistas ofrezcan sus contenidos a precios accesibles.
La publicidad no se limita a dar a conocer un producto, sino que busca persuadir, convencer a los posibles consumidores. Para lograrlo, emplea una cantidad de recursos creativos, con imágenes, juegos de palabras, etc. El poder persuasivo se ejerce sobre la voluntad del individuo, pero sin coartar la libertad del consumidor.
Desproblematizadora
La publicidad presenta un mundo sin problemas, divertido, fascinante. Muestra el lado bello de la vida para suavizar los aspectos negativos, como la crisis, la violencia, el dolor, la desigualdad social.
Financiadora
La publicidad contribuye a financiar los medios de comunicación. Un diario o una revista necesitan que sus páginas lleven publicidad para poder llegar a los lectores a precios accesibles.
Estereotipadora
Por su difusión masiva, la publicidad tiende a igualar gustos, criterios e ideales. Influye en los hábitos de consumo, las relaciones afectivas, los modos de vida. El cambio de gustos de los individuos puede generar actitudes despectivas hacia otros estilos de vida.
Sustantiva
La publicidad opera sustituyendo la presentación de un objeto real, tal como es, por un elaborado mensaje que muestra sus características. Por ejemplo, una publicidad de ropa puede plantear asociaciones del producto con la sensación de libertad, frescura, etc.
Economica
Hace vender el producto al mayor número de personas posibles. De esta manera, hace posible que el circuito económico no se rompa: progreso tecnológico→aumento de la producción→incremento del consumo.