Las patentes son cruciales para proteger invenciones que pueden aplicarse en diversas industrias. Para que una invención sea patentable, debe cumplir ciertos requisitos fundamentales.
Para aspirar a obtener una patente, la invención tiene que cumplir con los siguientes requisitos:
El proceso o producto debe ser una creación de algún ser humano, y no ser evidente para un técnico en la materia.
El proceso o producto debe basarse en una manera universalmente nueva de transformar la materia o la energía existentes en la naturaleza ( novedad)
El proceso o producto debe tener aplicación industrial, es decir, la posibilidad de ser producido o utilizado en cualquier rama de la actividad económica.