Kategorien: Alle - enfermedades - natural - edulcorante - diabetes

von 33:Roa Velazquez Alexis Vor 3 Jahren

184

Estevia: ¿dulzura 100% natural?"

La stevia, una planta conocida como Stevia rebaudiana, se utiliza en la herbolaria medicinal debido a sus múltiples beneficios para la salud. Se le atribuyen propiedades para tratar enfermedades como la diabetes, infecciones estomacales y problemas cardíacos.

Estevia: ¿dulzura 100% natural?

Estevia: ¿dulzura 100% natural?"

Sólo refinados

Hay que destacar el hecho de que en ninguna parte del mundo las instancias de salud aprueban como “aditivo alimentario” un extracto no refinado, ya que para estudiar su inocuidad y definir las dosis seguras de consumo, se requieren productos puros o químicamente bien definidos. Así, las hojas o extractos crudos de Stevia rebaudiana se comercializan como “complementos alimentarios”, pues contienen tal cantidad de sustancias que sería muy difícil demostrar la inocuidad de cada una de ellas.

La polémica

Hay una discusión permanente entre la industria y las instancias regulatorias sobre en qué circunstancias y para qué productos puede emplearse el calificativo de “natural”. Esta discusión es particularmente encendida en la Unión Europea (UE). A pesar de que no existe una legislación que obligue a una definición estricta de “natural” en la regulación sobre aditivos para alimentos, en lo que se refiere al edulcorante estevia la mayoría de los estados miembros de la UE prefiere que se use “extraído de una fuente natural” en vez de simplemente “natural”, lo que resulta más cercano a la realidad, y más informativo para el consumidor

Beneficios a la salud

Las hojas secas han formado parte desde siempre de la herbolaria medicinal y se les atribuyen propiedades para tratar enfermedades como diabetes, infecciones estomacales y problemas cardiacos. A las hojas secas de Stevia rebaudiana se les atribuye actividad antitumoral y anticancerígena, y capacidad para regular la presión arterial y la glucosa en la sangre y para detener la diarrea, según se reporta en una revisión de varias investigaciones publicada en la versión electrónica de la revista Food Chemistry de diciembre de 2011.
En las hojas de Stevia rebaudiana se han identificado más de un centenar de compuestos químicos, muchos de ellos reconocidos por sus efectos benéficos para la salud como el ácido fólico, minerales y vitaminas, en especial la vitamina C. Las hojas contienen incluso fructo-oligosacáridos, muy adecuados para la microbiota intestinal (ver ¿Cómo ves? Núm. 106) y en promedio un 10% de proteína en base seca.

De América a Asia

Los primeros cultivos de estevia se domesticaron en Japón en 1968 y en 1970 un extracto de hojas de esta planta se comercializó como endulzante y suplemento alimenticio. Actualmente la estevia ha sido adoptada y comercializada por varios países. En Paraguay el cultivo a gran escala comenzó en 1970, y a partir de entonces se ha introducido en Taiwán, Tailandia, Indonesia, Laos, Malasia, Filipinas, Argentina, Francia, España, Colombia, Bolivia, Perú, Corea, Brasil, México, Estados Unidos, Canadá, y sobre todo en China, que es hoy el principal productor del mundo.

Hierba dulce

En realidad, decir que estevia es un nuevo edulcorante es incorrecto. Durante siglos los indios guaraníes han endulzado el mate con sus hojas y utilizado la planta con fines medicinales,La Stevia rebaudiana es originaria de la región Amambay en el noreste de Paraguay y de las zonas limítrofes de Argentina y Brasil. La primera descripción botánica que se conoce de ella la hizo en 1888 el naturalista suizo Moisés Santiago Bertoni, quien cuatro años antes había emigrado con su numerosa familia a Sudamérica
por lo que se reproduce cortando los tallos que arraigan fácilmente. Esta forma de reproducción requiere mucha mano de obra o técnicas modernas, Los híbridos mejorados de Stevia rebaudiana tienen hojas más grandes y mayor concentración de los edulcorantes más importantes. Una hectárea de cultivo puede dar cabida hasta a unas 100 000 plantas y producir entre 1 y 1.2 toneladas de hojas que contienen entre 60 y 70 kg de compuestos dulces

Stevia rebaudiana

Splenda tenía la mayor parte de este jugoso mercado (36%), estimado en cerca de 1 500 millones de dólares al año. Pero en los últimos años ha surgido una nueva opción de edulcorante no calórico conocido como Stevia o estevia, que por ser extraído directamente de las hojas de la planta Stevia rebaudiana se distingue de los demás pues se consume sin modificación química alguna a su estructura, y particularmente para evaluar su inocuidad, se extrae de las hojas de la planta y se refina para obtenerlo con un alto nivel de pureza, mediante procesos industriales.
hace poco todos los edulcorantes no calóricos disponibles en el mercado eran artificiales (sintéticos), todos ellos aprobados por la Secretaría de Salud de nuestro país y considerados como seguros por la Oficina de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés).on el aspartame o aspartamo de la marca Canderel (sobrecito azul), la sucralosa de la marca Splenda (sobrecito amarillo) y la sacarina con el nombre de Sweet n’Low (sobrecito rosa); esta última se ha comercializado por más de 100 años.

Dulzura Natural

Con cantidades muy pequeñas, los edulcorantes artificiales producen la sensación de sabor dulce en nuestras papilas gustativas sin aportar calorías, no dejan de causar cierta preocupación en los consumidores, pues no son naturales El término “natural” es polémico y difícil de definir, pero es muy usado por la industria porque al consumidor le dice mucho y a la industria no la compromete a nada, ya que no existe una legislación específica que defina con claridad los límites de lo que es natural
sobre todo de quienes sufren de diabetes, difícilmente podemos decir que hayan contribuido a reducir la incidencia de obesidad, origen de varios de los problemas más graves de salud pública en México y el mundo.
Podría parecer que los edulcorantes artificiales son muy recientes, pero empezaron a desarrollarse hace más de un siglo. Son las sustancias que nos permiten seguir experimentando el placer de saborear lo dulce sin pagar el precio de ingerir una buena dosis de calorías