La importancia de cuidar nuestro entorno y todas las especies que lo habitan es una responsabilidad compartida. Se nos invita a ser los guardianes de nuestro hogar común, aprendiendo a respetarlo y evitando su deterioro.
seamos los custodios de esta casa común que nos acoge
y a aprender a respetarla y a evitar que la sigan maltratando y arruinando
El mejor antídoto para cuidar y proteger nuestra casa
La contemplación
El mismo Señor nos invita a admirar maravillados y en silencio su obra
para poder reconocer en cada creatura el reflejo de su sabiduría y su bondad
Regla de oro
"Cuidarnos entre nosotros"
teniendo en cuenta a todas las especies del mundo
Ser contemplativos nos lleva a ser responsables, con estilos de vida sostenibles que respeten y protejan la naturaleza, de la que también nosotros formamos parte.