jonka EMILY MARIEL MELGAR BENAVIDES 3 vuotta sitten
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Paed de Historia Universal y Historia del Perú
Durante el periodo del imperialismo, diversas naciones lograron una hegemonía significativa sobre otras, expandiendo así un mercado capitalista dinámico e integrado. Esta expansión benefició a numerosos países europeos y también a naciones fuera de Europa.
Todo este contexto post primera guerra mundial convierte a Norteamérica en el principal núcleo económico mundial
La producción fabril se destinaba a la India, América y llegaba a China.
Al final de esta etapa todas las civilizaciones quedan vinculadas al sistema capitalista industrial mundial bajo la hegemonía de las potencias atlánticas.
Europa exportaba textiles, productos metálicos, bebidas y alimentos; Asia seguía exportando especias, textiles y bienes suntuarios. América se especializaba en la exportación de azúcar y metales preciosos (oro y plata). Y África, exporta seres humanos esclavizados en por lo menos un 90 %.
Topic principalEuropa. Los embarques iniciales se hicieron en 1841 a Inglaterra a manera de ensayo
Los científicos peruanos tuvieron que enfrentar la falta de apoyo y el predominio de los militares.
El imperialismo hizo posible la hegemonía de diversas naciones sobre otras.
Ello desarrolló un mercado capitalista cada vez más amplio, dinámico e integrado y a su vez un mercado definido en producción, consumo y fluctuaciones económicas.
En 1872 el guano sufría la competencia del salitre, explotado por empresas particulares y muchas de ellas extranjeras.
Surgió un gran debate nacional alrededor de cómo manejar dicha competencia.
El imperialismo hizo posible la hegemonía de diversas naciones sobre otras
Esto desarrolló un panorama de prosperidad para muchos países europeos, pero también a naciones fuera de Europa.
Dicha prosperidad desencadenó a inicios del siglo XX una serie de procesos violentos de los que el más importante fue la Gran Guerra o la primera guerra mundial, evento que adormeció y magró la economía europea durante los años que duró la guerra e hizo lenta la recuperación y adaptación europea después de la primera guerra mundial.
Surgió el primer conflicto con la Gran Colombia y luego la cuestión de la Confederación Perú – Boliviana.
Inglaterra y Europa consolidaron el comercio mundial a lo largo del siglo XIX.
Según la doctrina del “uti posidetis”, Perú debía heredar los límites de los que fuera el virreinato de Lima en 1810.
Esos límites eran vagos y fueron motivo de controversia por largos años.
Una vez finalizada la guerra, EE.UU. se había convertido en el principal proveedor de las naciones europeas en disputa, e incluso una vez concluido el conflicto Norteamérica, se convierte en el elemento dinamizador y principal inversionista de las economías europeas.