En el contexto de la tecnología de la información, se destacan varias áreas esenciales que aseguran el funcionamiento eficiente y seguro de los servicios tecnológicos. Los departamentos de TI se organizan en diferentes áreas especializadas, incluyendo la gestión de aplicaciones empresariales, la planificación estratégica, el control de riesgos, las comunicaciones y los sistemas e infraestructuras.