Las competencias de un formador se dividen en básicas, técnico-profesionales y transversales. Las competencias básicas son esenciales para todos los trabajos, mientras que las técnico-profesionales se relacionan con la formación específica de una profesión.
Fuente de criterios e indicadores, condicionará el conjunto la
relación con y entre el resto de dimensiones consideradas.
Personas implicadas en el proceso de evaluación
Aplicación de los mismos y el acopio de una
información significativa
Tecnológico, interpretativo o sociocrítico
Puede realizarse antes de llevar a cabo una
acción , durante y al final del proceso
Diagnóstica, formativa o sumativa
Corresponde con lo que queremos evaluar
Desarrollo de la formación
Estrategia de acción que requiere la
movilidad laboral como base adaptativa y renovadora.
1. Dominio de las técnicas de análisis del proceso. 2.— Dominio de las técnicas de análisis de los resultados. 3.Conocimiento puntual y prospectivo de las tendencias socioculturales
1.Dominio : de la estructura técnica y cultural. 2.Conocimiento: de las estructuras psicopedagógicas. 3.Práctica: de la realidad social y económica del mundo
Tipologías
Competencias transversales
comunes en una determinada rama o familia de profesiones y ocupaciones de producción y/o servicios.
Competencias técnico-profesionales
Las específicas de una profesión y vienen facilitadas por la formación específica
Competencias básicas
Comunes a todas las ocupaciones y que resultan imprescindibles para incorporarse al mercado de trabajo