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a facundo guirin 3 éve

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El papel del juego en el desarrollo del niño.

El juego tiene un papel fundamental en el desarrollo infantil, pero su definición como una actividad placentera es insuficiente. No todas las actividades que proporcionan placer se consideran juego, y algunas actividades lúdicas no son placenteras en sí mismas.

El papel del juego en el desarrollo del niño.

El papel del juego en el desarrollo del niño.

La definicion del juego como una actividad placentera del juego resulta inadecuada y se divide en dos.

1)Porque existen muchas act que propocionan al pequeño mayores exprencias de placer en el juego.Ej:succionar un chupe.
2)Porque hay juegos en las act no es placentera en si misma.

El placer no lo podemos considerar como una caracteristica definitoria del juego.

El juego no es exactamente una accion simbolica en el sentido estricto,sino que es impresincible averiguar el papel de la motivacion del juego.

comporta una situacion imaginaria es de hecho el juego provisto de reglas

Podemos ir mas lejos y asegurar que no existe juego sin reglas.

La situacion imaginaria de cualquier tipo de juego contiene ya ciertas reglas de conducta,aunque estos no se formulen explicitamente ni por adelantado.

Tambien hay importantes procesos cogmostivos olvida no solo la motivacion que impele al niño actuar sino tambien sus caracteristicas.

Las aproximaciones realizadas hasta ahora;no nos ayuda en absoluto a comprender el papel y desempeña el juego en el posterior desarrollo.

Al niño lo describimos como el desarrollo de sus funciones intelectuales; todo niño se presenta ante nosotros como un teorico que es caracterizado por un nivel bajo o alto.

Pero si ingoramos las necesidades del niño,asi como los incentivos que lo mueven a actuar, nunca poderemos llegar a comprender su progreso.
Un niño pequeño tiende a graficar sus deseos de modo inmediato normalmente al intervalo que va entre el deseo y su sastifaccion suele ser muy cortos.

cuando alcanzan la edad escolar emergen numerosas tendencias irrealizables y deseos propuestos.

en los comienzos de la edad preescolar se retiene todavia la tendencia a la inmediata sastifaccion de la misma.

La conducta del pequeño sufre un cambio

para resolverlo esta tension el niño en edad preescolar entra en un mundo ilustro e imaginario.