da flor lopez mancano 3 anni
284
Più simili a questo
Los temores de los niños pequeños surgen en buena medida de su intensa vida de fantasía y de su tendencia a confundir apariencia con realidad. En ocasiones su imaginación puede descarrilarse y los hace preocuparse por la posibilidad de ser atacados por un león o de ser abandonados. Los temores pueden provenir de la experiencia personal o de lo que escuchan acerca de las experiencias de otros, para ayudar a prevenir los temores de los niños los padres pueden inculcarles un sentido de confianza y cautela normales, no ser sobreprotectores y superar sus propios miedos infunda- dos. Pueden apoyar a un niño miedoso tranquilizándolo y alentando la expresión abierta de los sentimientos
La agresión instrumental, la forma más común de violencia en la niñez temprana en que se utiliza la agresión como instrumento para alcanzar una meta. Mientras los varones manifiestan más agresión abierta (directa) (agresión física o verbal dirigida explícitamente a su objetivo), es más probable que las niñas, en especial las mayores practiquen la agresión relacional (social o indirecta). Este tipo más sutil de agresión consiste en dañar o interferir en las relaciones, reputación o bienestar psicológico, a menudo por medio de burlas, manipulación, ostracismo u ofertas por el poder.
El altruismo es el centro de la conducta prosocial, la actividad voluntaria con el propósito de beneficiar a otro. Los padres que mostraban afecto y utilizaban estrategias disciplinarias positivas solían alentar la tendencia natural de sus hijos a la conducta prosocial.
Entre los estadounidenses de origen asiático, la obediencia y la severidad no se asocian con la dureza y el dominio, sino más bien con el cariño, el interés, la relación y la conservación de la armonía familiar. La cultura china tradicional, con su hincapié en el respeto a los mayores, destaca la responsabilidad de los adultos para mantener el orden social enseñando a los niños conductas socialmente apropiadas.
Familias con alto riesgo de que sus niños presentaran problemas de conducta que participaron en un programa de “supervisión familiar” que proporcionaba servicios cruciales de apoyo a la crianza pudieron mejorar los resultados en la niñez por medio de un enfoque temprano en las prácticas de crianza positivas y proactivas mas sin embargo sólo establecen asociaciones entre cada estilo de crianza y un conjunto particular de conductas del niño, pero no demuestran que los distintos estilos de crianza infantil ocasionen que los niños sean más o menos competentes.
ldentificó tres estilos de crianza y describió los patrones de conducta característicos de los criados de acuerdo a cada estilo.
La crianza autoritaria puede ocasionar algunos problemas en los niños como pueden ser distraídos o desconfiados a causa de los padres de familia ya que tratan de lograr que los niños se conformen a un conjunto de normas de conducta y los castigan de manera arbitraria y enérgica por violarlas.
En la crianza permisiva los niños tienden a ser inmaduros y son los que muestran menos auto control y menos exploración exigen poco y permiten que los niños supervisen sus propias actividades tanto como sea posible.
Se espera que estos niños tengan un buen desempeño, cum- plan los compromisos y participen activamente en las tareas familiares, pero también en la diversión. Conocen la satisfacción de aceptar las responsabilidades y de lograr el éxito.
Las técnicas inductiva son diseñadas para alentar la conducta deseable o desalentar la que no lo son por medio del razonamiento con el niño. La afirmación del poder detenga o desaliente la conducta indeseable haciendo respetar el control paterno por medios físicos o verbales; incluye exigencias, amenazas, retiro de privilegios, zurras y otros tipos de castigo. El retiro del amor incluye ignorar, aislar o mostrar desagrado por el niño.
En ocasiones los padres castigan a sus hijos para erradicar la conducta indeseable, pero lo que ellos no saben es que los niños por lo general aprenden más cuando su buena conducta es reforzada. Mas sin embargo en ocasiones es necesario el castigo, como aislamiento o negación de privilegios. El castigo demasiado severo puede ser dañino para los niños como lo es el castigo corporal ya que el niño puede actuar de manera agresiva o con conducta antisocial aparte del riesgo de lesiones siendo esta potencialmente dañino para los niños.