La terapia familiar ha evolucionado considerablemente desde sus inicios, especialmente en el ámbito psiquiátrico y psicológico. En España, comenzó a ganar relevancia en 1983. Figuras pioneras como John Bell y John Bowlby desempeñaron papeles cruciales; Bell se enfocaba en tratamientos individuales mientras que Bowlby utilizaba entrevistas familiares.