Los primeros filósofos presocráticos son figuras clave en la historia del pensamiento occidental. Tales de Mileto postuló que el agua es el principio de toda vida y que la tierra flota sobre ella.
Son en cierta forma los precursores de la física y la química moderna. Consideran que la naturaleza tiene como fundamento material último pequeñas partículas indivisibles (átomos) que se mueven libremente en el vacío.
Pitágoras
Es el fundador de la Hermandad Pitagórica, una sociedad que, si bien era de naturaleza predominantemente religiosa, se interesaba también en medicina, cosmología, filosofía, ética y política, entre otras disciplinas.
Anaxágoras
Anaxágoras dio también un gran impulso a la investigación de la naturaleza fundada en la experiencia, la memoria y la técnica.
Empédocles
… Este filósofo plantea que el principio del cosmos son cuatro elementos agua, tierra, fuego y aire, de ahí que a sus planteamientos se les consideren como pluralistas. Los objetos del mundo natural son combinaciones en proporciones matemáticas de estos elementos.
Heráclito de Éfeso
Este pensador propone como elemento constitutivo del cosmos al fuego, sin embargo, su aporte a la filosofía está en su visión dinámica de la realidad: “Todo está en continuo movimiento, todo fluye, nada permanece, lo propio del universo es el eterno devenir de las cosas”.
Anaximandro de Mileto
La respuesta dada por Anaximandro a la cuestión del Arjé puede considerarse un paso adelante respecto a Tales. El Arjé es ahora el Ápeiron, es decir, lo indeterminado, lo ilimitado.
Anaxímenes de Mileto
Anaxímenes nos ofrece un mecanismo de explicación de la generación de las cosas a partir de otro elemento distinto de ellas: ese mecanismo de generación se apoya en las nociones de “condensación” y “rarefacción”.
Tales de Mileto
Tales vivía en Mileto, ciudad junto al mar, seguramente de tanto observar la naturaleza concluyó que el agua es el principio de la vida: “todo viene de ella y retorna a ella”. En cuanto a su cosmología. Afirmaba, según las referencias que nos han transmitido los antiguos, que la tierra estaba sobre el agua, flotando como un disco.