Un análisis de la interacción humana revela varios aspectos preocupantes en diversos contextos profesionales y sociales. En términos de género, se observa una tendencia a priorizar a los hombres sobre las mujeres, lo cual se manifiesta en la desigualdad en la administración de medicamentos y una confianza sesgada al discutir ciertos temas según el sexo del interlocutor.