Las teorías modernas del comercio internacional examinan diversos modelos que explican la dinámica comercial entre países. La teoría centro-periferia destaca la acumulación de capital en países ricos, denominados centros, que producen bienes de alta tecnología y servicios cualificados, mientras que los países pobres, o periferia, se especializan en productos primarios y manufacturas de bajos costos laborales, aumentando la brecha económica.
Surge la idea de exportar. Esta exportación, por tanto, se realizará a países que tengan una demanda similar, por tener un nivel de vida parecido.
Las naciones se benefician de la especialización y las empresas tienen un mercado de mayores dimensiones, lo que les permite beneficiarse de las economías de escala.
Los productos que se intercambian frecuentemente pertenecen a los mismos sectores, pero cada nación produce un tipo de producto determinado.
Teoría Heckscher-Ohlin
Los países tienden a exportar los bienes que son intensivos en los factores de los que están especialmente dotados. De esta forma es lógico que Arabia Saudita exporte petróleo y Ucrania trigo, puesto que son bienes que pueden producir de forma muy competitiva.
En muchas ocasiones la ventaja proviene de que los países poseen la organización y las infraestructuras necesarias.
Un país abundante en capital tendrá su ventaja comparativa en los sectores intensivos en dicho factor, lo que dota de mayor productividad al trabajo. Es el caso de Alemania, Japón o Estados Unidos.
Modelo gravitacional del comercio
Así, además de la distancia, influyen en la cercanía factores como la afinidad cultural y la existencia de tratados que liberalicen el comercio.
Para esta teoría el comercio entre dos países se establece en función de dos variables: el Producto Interior Bruto y la cercanía, que no se entiende en sentido espacial, sino económico.
Se basa en modelos econométricos, y por ello está contrastado con la realidad empírica.
Teorías del centro-periferia
Los países ricos son aquellos que han conseguido acumular capital.
Los mercados en los que se centran los países de la periferia generan menos beneficios, de forma que la brecha entre los países pobres y ricos aumenta.
los países pobres, denominados periferia, se especializan en los productos del sector primario y aquellos bienes industriales cuya producción se basa en bajos costes laborales.
Esta teoría les llama centros. Concentran la producción de bienes de alta tecnología y servicios cualificados. En estos productos se acumulan las mayores rentas (al trabajo y al capital).
Pueden considerarse herederas de la teoría Heckscher-Ohlin.