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av Manuela Forero 3 år siden

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COLOMBIA IMPACTO ECONÓMICO, SOCIAL Y POLÍTICO DE LA COVID-19

La pandemia de COVID-19 ha tenido un profundo impacto en Colombia, afectando tanto el ámbito económico como el social y político. La cuarentena ha exacerbado la vulnerabilidad de los líderes sociales, con varios asesinatos reportados y una evidente falta de protección.

COLOMBIA
IMPACTO ECONÓMICO, SOCIAL Y POLÍTICO DE LA COVID-19

COLOMBIA IMPACTO ECONÓMICO, SOCIAL Y POLÍTICO DE LA COVID-19

La situación sanitaria

Es importante tener en cuenta que en Colombia solo dos de cada diez hogares cuenta con ahorros para cubrir un imprevisto, y que el sistema laboral está especialmente precarizado, lo que afecta incluso a profesionales con un alto nivel de formación y al personal sanitario.
Asimismo, se ha puesto en marcha un ingreso solidario único de Por tanto, en el marco de la actual crisis, se corre el riesgo de que el sistema deje fuera a personas vulnerables, que en el corto plazo pueden verse desempleadas, pero que no van a disponer de tiempo para cambiar de domicilio para acceder a los subsidios.
La epidemia social En Colombia, un 47% de los trabajadores está en la informalidad, es decir, 5,7 millones de personas. Por otra parte, la tasa de pobreza multidimensional en Colombia. Acción, Colombia Mayor y Colombia Joven, que llegan a unos 12 millones de personas.
Tras el primer mes de seguimiento de la COVID-19, la situación en Colombia parece controlada, con un ritmo de infección en el que los contagios se duplican tan solo cada tres días. El sistema cuenta con 2,2 médicos por cada 1.000 habitantes y tiene unas 5.500 camas de cuidados intensivos.

Desafíos adicionales

Durante la cuarentena ya han sido asesinados nueve líderes sociales, cuya desprotección ha aumentado al estar confinados. A este respecto, incluso Amnistía Internacional ha denunciado la limitación de los esquemas de protección de muchas personas.
Esta situación, con cientos de personas desplazándose y cruzando la frontera en plena cuarentena, es de enorme riesgo. La incapacidad de este país para enfrentar la pandemia, en un contexto de escasez de recursos, hace temer que se genere una situación incontrolable. A esto se agrega la terrible realidad que afronta Ecuador, tanto por la pandemia como por el impacto económico. Sistema de Integración Centroamericana se han producido avances, no es el caso en la región andina.

Simultáneamente, las autoridades han de afrontar la gestión y planificación de la crisis en un país masivamente urbano.

Finalmente la cuarentena se amplió hasta el 11 de mayo, con un retorno escalonado de las actividades productivas a partir del 27 de abril2. Este contraste da cuenta de la evolución del contagio y de su impacto diferenciado sobre los más pobres, quienes tienen mayores dificultades y menores incentivos para cumplir la cuarentena.

Para finalizar, es necesario subrayar la responsabilidad de las élites del país, que se han mostrado apáticas y no han estado a la altura de lo que podría haberse esperado de ellas. Por efecto de la crisis, va a producirse un proceso de transformación del sistema internacional en el que se requiere el concurso de los más poderosos. Entre ellos, del sistema bancario, un sector bastante concentrado y sólido, pero que hasta ahora ha puesto poco de su parte para paliar la crisis. Con estos números, el sistema tiene margen para contribuir decisivamente a la salida de la crisis y, de paso, para aplicarse en mejorar la bancarización de los colombianos.

(Duque inició 2020 como un presidente débil. Sin embargo, la situación es tan excepcional que permite el giro de toda estrategia y la posibilidad de que cualquier dirigente despunte por su manejo de la crisis.)

La aglomeración de personas en dicho servicio es insostenible para la prevención del contagio. El gran desafío de la ciudad será reinventar los sistemas de transporte, urbanismo y gestión de servicios para un futuro en el que habrá que convivir con el virus.

Durante los meses de marzo y abril la curva de contagio y mortandad en Colombia ha mostrado una evolución moderada. Ya a principios de abril, el presidente planteó la necesidad de planificar una salida «inteligente» de la crisis. Dado el impacto sobre la economía, los empresarios le urgieron a suavizar la cuarentena para evitar un mayor deterioro del tejido productivo

Ante la crisis de la COVID-19 tendría que replantearse la política de lucha contra las drogas, teniendo en cuenta que esta también repercute en la sobrepoblación carcelaria. Las cárceles, como se ha señalado, son uno de los focos más preocupantes de contagio. Su dimensión, que alcanzaba a un millón y medio de personas, ya implicaba una enorme presión sobre la política de atención social, tanto en las regiones de frontera, como en los grandes núcleos urbanos. El impacto de la cuarentena sobre los medios de vida de los migrantes venezolanos ha sido de tal magnitud que, en los primeros días de abril, más de 2.600 personas intentaron retornar a su país de origen y, desde entonces, unas 500 personas regresan diariamente.

La financiación de la crisisal

Hasta la fecha, la última de las medidas adoptadas por el gobierno ha sido Por su parte, los entes locales también han destinado los recursos con los que cuentan para atender la emergencia social. Esta disponibilidad de recursos propios, donaciones y acceso a fondos multilaterales es una tabla de salvación, avalada por la fortaleza de los órganos de control monetario y planificación del país . Ahora bien, los recursos disponibles siguen siendo limitados para atender un alargamiento de la crisis.
Asimismo, Colombia cuenta con una línea de crédito de 11.000 millones de dólares con el FMI. Colombia es uno de los países que mejor gestionan su economía y en el cual el cumplimiento de la regla fiscal ha sido más estricto, por lo que ya disponía de un margen de endeudamiento con la institución.

Profundización de la crisis económicac principal

En los escenarios más pesimistas se estima que la economía podría caer hasta el -7,9%, según Fedesarrollo. Adicionalmente, los distintos escenarios del impacto de la crisis asumen que el desempleo podría aumentar entre un 15% y un 20,5% . Las dimensiones globales de la crisis y la falta de evidencia sobre el comportamiento epidemiológico del virus hacen difícil predecir la evolución económica mundial en el segundo semestre de 2020.
En Colombia se tomaron rápidamente medidas macroeconómicas para hacer frente, al menos en el corto plazo, a la emergencia. También se redujeron los encajes bancarios, se rebajó la tasa de interés y se realizaron operaciones de venta de divisas a futuro y de swaps, con el fin de dar liquidez a la economía.
En enero, las perspectivas económicas de Colombia para 2020 no eran las mejores de los últimos años. Se preveía que la desaceleración de la economía mundial y el bajo precio del petróleo iban a afectar gravemente sobre los ingresos del Estado.
Colombia no es una de las economías más internacionalizadas de la región. Así, aun suponiendo que Colombia no experimente el peor escenario epidemiológico, su estructura económica hará que sufra enormemente el impacto de la crisis internacional, al menos en el corto y mediano plazo.

Un gobierno débil para gestionar la crisis

La gestión de la crisis en Colombia se inició con el debate sobre las diferencias de criterio entre el gobierno central y los gobiernos localesLos mandatarios locales solicitaban el cierre urgente, pero el gobierno lo retrasó hasta el 23 de marzo.
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, y el presidente Duque protagonizaron otro choque, a propósito del levantamiento de la suspensión de las actividades industriales y de construcción, decretado a partir del 27 de abril. El presidente ha decidido reactivar algunos sectores productivos, dado el coste económico de su paralización.

INTRODUCCION

La expansión de la pandemia de la COVID-19 es en parte resultado de la movilidad internacional, de un modelo de interdependencia global que ahora está en cuestión.inestabilidad sociopolítica, tras las protestas masivas contra el gobierno en noviembre y diciembre de 2019.
La pandemia es un problema global, pero se enfrenta de manera local. Desde que en la primera semana de marzo se detectara el primer caso en Colombia
En Colombia, al igual que en el resto de América Latina, la mayor parte de los casos iniciales de coronavirus provinieron de España y Estados Unidos.