Kategorier: Alle - diplomacia - conflicto - política - coronavirus

av Isabella Gonzalez Quintero 4 år siden

182

Coronavirus, diplomacia y política de Alfonso Gómez Méndez

En 1932, durante el gobierno de Olaya Herrera, Colombia afrontó un ataque peruano a Leticia que llevó a una guerra entre ambos países. En este contexto, Laureano Gómez, un opositor al régimen liberal, propuso una tregua interna para concentrarse en la amenaza externa, acuñando la frase "

Coronavirus, diplomacia y política de Alfonso Gómez Méndez

Coronavirus, diplomacia y política de Alfonso Gómez Méndez

¿qué pasa?

Un mal manejo de lo que logre hacerse en las fronteras –en especial en esta– puede resultar demoledor para la tremenda amenaza que enfrentamos. Tomando la citada idea que a nivel interno planteó aquí ese líder conservador, ¿por qué no auscultar una especie de ‘tregua’ en la confrontación con Maduro.

Si hasta en las guerras más encarnizadas se conceden treguas por razones humanitarias, ¿por qué no hacerlo nosotros sin darle respiro a la dictadura de Maduro, máxime si tenemos el antecedente de que, aun en el fragor de la guerra de independencia, Bolívar firmó una con el invasor Pablo Morillo, justamente para tratar enfermos e intercambiar prisioneros?

opinion del autor sobre esto

fue un error no dejar abierta una puerta de diálogo –sin necesidad de reconocer un gobierno ilegítimo– para tramitar asuntos comerciales o de vecindad con un país con el cual tenemos una frontera ‘porosa’ de más de 2.000 kilómetros. Ante la pandemia del coronavirus –y aun cuando el presidente Duque anunció un diálogo con las autoridades de salud venezolanas a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS)–,

debería pensarse en la urgencia de abrir siquiera un canal de comunicación entre las autoridades sanitarias de los dos países, a fin de controlar la emergencia e impedir la extensión de sus efectos.

hoy en dia

nosotros no estamos en guerra abierta con Venezuela, el actual gobierno hizo de la oposición al régimen dictatorial de Maduro el eje central de su política exterior en la región. Eso lo llevó a romper toda clase de relaciones diplomáticas, consulares y comerciales, no con Venezuela como nación ni con los ‘hermanos’ venezolanos, sino con un sistema que desconoce las libertades públicas y la separación de poderes.

En 1932

el gobierno liberal de Olaya Herrera se produjeron el ataque peruano a Leticia y la subsiguiente declaratoria de guerra entre los dos países, dos hechos importantes quedaron registrados para nuestra historia: Laureano Gómez iniciaba su intensa oposición al régimen liberal recién instaurado, y frente a la situación presentada por la invasión extranjera decretó tregua a la oposición al régimen y acuñó la frase que hizo carrera: “Paz en el interior y guerra en las fronteras”.