La inquisición española se centró en investigar y corregir comportamientos relacionados con la brujería entre los cristianos viejos y sus descendientes, así como en comunidades de negros e indígenas.
La inquisición española pretende analizar los comportamientos relacionados a la brujería de los cristianos viejos y sus descendientes y de ser necesario proceder con los correctivos pertinentes.
En 1692 un pueblo llamado Salem fue invadido por la brujería, se dice que gran parte de esto fue por la llegada de 20.000 personas de Inglaterra.
El hecho ocurrido en Salem representó la tragedia de la constante lucha de la dignidad humana con las fuerzas que intentan quebrantarla.
Algunos documentos recogidos en la ciudad de Scligmann evidencian el arrepentimiento del juez y del jurado de Massachusetts, afirmando que no eran capaces de comprender todas la fuerzas oscuras con las que habían luchado y que temían haber derramado sangre inocente a causa de la ignorancia, ademas de eso piden perdón a las víctimas y solicitan que ninguna otra persona vuelva a hacer lo mismo.
Intento de Reivindicación, hecho que nunca hubo en Cartagena.
La comparación entre Salem y Cartagena, evidencian una sustancial diferencia entre Latinoamérica y Norteamérica pero también sugieren el mismo inicio del mal, ese demonio que vino de Europa en los galeones y penetro en la hechicería ingenua de negros e indígenas y la puso en el camino del castigo.
Massachussets, Connecticut y New Haven habían constituido la capital de la brujería donde se iba a empezar a impartir sentencias de muerte, convirtiendo este episodio en uno de los más famosos de América y en uno de los más importantes en cuanto a la herencia traída de Europa.
"Brujería de los procesos"
En un inicio se ordenaba no proceder contra los indígenas. La brujería indígena era menospreciada porque se consideraba poco peligrosa o sin peligro.
Posee elementos de negros e indígenas.
Esta destinada a la persecución inquisitorial al tiempo de que iba fusionándose secretamente con elementos de los negros y de los indios, que la cambiaron en gran medida.
La brujería era cuestión de todos los días. El primer edicto de la inquisicion española sugiere que las denuncias eran en su mayoría por causa de los hechiceros, embustes perniciosos y sortilegios en busca de que Dios los remediara.
A inicios de 1600 la brujería se iba a presentar como un medio de contacto sexual entre blancos y negros y esta noción de índole sexual iba a predominar en América.
Las supuestas brujas eran a menudo confundidas con sombras nocturnas.
Inconsistencias sobre los relatos documentados en torno al macho cabrío.
Los inquisidores desconocían todos los secretos de la brujería africana.
Interrogantes en las acusaciones.
Hay una desfiguración en sus datos históricos, ya que proceden de un solo sector y ese sector es la inquisición española.
Procedía de un antiguo proceso de depuración.
Brujería importada, traída por colonos y emigrantes.
Brujería en Norteamérica
Surgen ciertos elementos que se encuentran en el imaginario colectivo acerca de la brujería, como las escobas voladoras, los aquelarres en medio del bosque etc. El escenario ya no son los castillos medievales, sino las cabañas y las pequeñas aldeas.