El reportaje es una forma de periodismo que explora y analiza temas de interés desde diversas perspectivas. Existen varios tipos de reportajes, cada uno con características distintivas.
De cara al mundo hiperinformado de hoy, en el que el rol de los medios de comunicación es constantemente cuestionado, el reportaje cobra importancia de cara a sus enormes posibilidades expresivas y de construcción de un punto de vista. De hecho, podría decirse que actualmente existe una proliferación de puntos de vista que no siempre contribuye a la democratización de la información.
Tipos de fuente informativa
La fuente informativa de un reportaje puede ser tan variada como lo permita el coraje y el talento del periodista. Relatos, entrevistas informales, todo puede contribuir con la escritura del artículo, aunque haya fuentes mucho más confiables y comprobables como documentación escrita, libros, publicaciones, diarios, emisiones de radio o televisión.
Tipos de reportaje
• Científico. Aborda una dimensión del saber tecnológico o científico y lo explica e interpreta en términos legos.
• De investigación. Sin dejar a un lado el marco noticioso, el periodista profundiza en un tema o evento desde múltiples aristas, haciéndole seguimiento y completando un verdadero dossier informativo.
• Explicativo. Se interesa por eventos del quehacer noticioso, y detalla los aspectos de ellos que se consideren relevantes en el momento histórico en que ocurren.
• Narrativo. Semejante a la crónica, aborda el tópico de interés a partir de un recuento narrativo de sus eventos.
• Formal. Pretendidamente objetivo, se contenta con dar información respecto al tema, un poco a la usanza de las reseñas noticiosas.
• Autobiográfico. Acuñado por el periodista norteamericano Tom Wolfe, este reportaje asume al propio periodista como pivote para adentrarse narrativa y descriptivamente en una cierta temática.
• Descriptivo. Aborda su temática específica basándose en la capacidad de observación y de detalle del periodista, para reconstruir impresiones tenidas en persona.
Virtudes esperadas del reportaje
Se espera de todo reportaje dos grandes virtudes, en principio:
• Exhaustividad. Se espera que un reportaje agote las fuentes disponibles sobre un tema o bien delimite el marco informativo del cual se nutre.
• Objetividad. Si bien éste es un punto álgido en el periodismo, se espera de un reportaje una cierta sinceridad respecto a sus fuentes, su propia investigación y su abordaje del tema. Eso no contradice necesariamente la toma de una postura o la elaboración de una reflexión, pero requiere un abordaje ético e informado del tema.
Estructura del reportaje
Hay muchas formas de realizar un reportaje, y los periodistas con mayor dimensión autoral pueden prácticamente hacer lo que les plazca. Sin embargo, la estructura tradicional es más o menos la siguiente:
• Un índice, sumario o titular. Donde se condensa la información y muy rápidamente.
• Un párrafo de entrada. En donde se capta la atención del lector y se le provee de la información inmediata para situarse en el contexto de la investigación.
• El cuerpo del reportaje. Donde se encuentra el grueso de la información.
• Un cierre. Que puede ser de tipo cerrado (arroja conclusiones) o abierto (invita al lector a sacar las suyas).
Los reportajes a menudo aparecen acompañados de entrevistas u otro tipo de abordajes informativos. Suele considerársele ejemplo del periodismo de investigación.
El reportaje debe ser lo más comedido posible en la transmisión de posturas respecto a lo narrado, como en casi todas las ramas del periodismo; aun así, de un reportaje se espera un buen nivel de análisis de lo referido y comprensión profunda de la materia, que confiere cierto protagonismo al autor.
El reportaje es un tipo de narración periodística que recompone sucesos de carácter noticioso y los divulga con fines informativos. Se le considera un género documental, si bien puede contener información subjetiva de parte de su autor, pero distinto a la columna de opinión o a la crónica, mucho más permisivas en materia de estilo.