por Uri CM 3 anos atrás
265
Mais informações
La DNA ligasa es la encargada de unir los fragmentos de Okazaki mediante enlaces fosfodiéster, lo que da paso a la formación de una cadena continua.
Gracias a la acción exonucleasa 5´-3´que tiene la enzima DNA polimerasa I, se eliminan los ribonucleótidos de los cebadores. Para llenar los huecos, la enzima hace uso del extremo 3´ y así introducir nuevos desoxinucleótidos.
Para ambas cadenas, la DNA polimerasa III introduce nucleótidos a los RNA cebadores; la adenina siempre irá acompañada de una timina y la guanina de la citosina. Enseguida se formaran los puentes de hidrogeno entre las bases complementarias. Cabe aclarar que este proceso se da en la dirección 5´ a 3´.
Mediante una especie de pinzas deslizantes, la enzima DNA polimerasa se unirá a cada una de las cadenas nuevas que se sintetizarán a partir de las cadenas molde.
A partir de que la doble hélice se encuentra abierta, gracias a la enzima primasa empieza un proceso de síntesis de RNA cebador. El cebador en cuestión se une complementariamente en el lugar de origen de la replicación.
En esta etapa se genera un superenrrollamiento causado por una tensión de enrrollamiento por delante de la horquilla. Para disminuir este efecto, interviene la enzima DNA girasa. Su función es la de hacer cortes en las cadenas de ADN y catalizar movimientos locales para deshacer los giros y los nudos que se formaron el el superenrrollamiento.
Una horquilla de replicación es básicamente el resultado del paso anterior, es decir, es el origen de la abertura que va moviéndose a lo largo del ADN. Para su estabilización se le unen las SSBP.
Las proteínas DnaA se unen a las moléculas de ATP de tal manera que, en conjunto hacen posible que se abra una agrupación de secuencias enriquecidas en AT. Con esto, se facilita la unión de la enzima helicasa que tiene como función abrir aún más la hélice.
El sitio de replicación de ADN es un lugar específico que depende directamente del tipo de microorganismo.