Resistirse y morir: El arte
Mexicano contemporáneo como
espectáculo
Durante gran parte del siglo XX, el arte contemporáneo mexicano se caracterizó por su simbólica función de transgredir, destacándose más como herramienta simbólica que como mercancía.
Resistirse y morir: El arte
Mexicano contemporáneo como
espectáculo
El arte mexicano post revolucionario
En México el arte se ve, cuando se ve, como un pasatiempo. No es ésa la visión que el mercado internacional tiene del arte mexicano contemporáneo.
Vision Funcionalista
En el arte moderno lo concibe fundamentalmente como un arte pro positivo, con una propuesta de transformación, de cambio de los modos de ver o vivir. Después de la Segunda Guerra Mundial, y con el surgimiento de lo que entonces se denominó sociedad post-industrial.
Siglo XX
Historia del arte sostener que durante gran parte del siglo xx, en el periodo habitualmente denominado modernidad,el papel simbólico del arte fue el de transgredir.
Hasta mediados del siglo xx la creación artística genuinamente moderna enfatizaría su función simbólica y sólo incidentalmente dejaría entrever su carácter de mercancía. El arte era entonces, sobre todo, una herramienta simbólica.
Años 70
Desde los 70 y a lo largo de la década de los So el arte se ha ins-titucionalizado como un bien de consumo que se caracterizó, primero, por recuperar soportes benévolos como la pintura y, luego, por asimilar y promover las diferencias desde dentro del mercado.
Finales de los 60
El alcance de esta transformación en la concepción del arte es algo que escapó a los últimos teóricos de la modernidad.
Las galerías de arte y los museos se institucionalizaran como los ámbitos ineludibles de presentación y difusión de las artes plásticas.
Postguerra
A la vez que el arte de vanguardia daba sus últimos coletazos , ya se estaban implantando los canales por los que inexcusablemente se distribuirá el arte desde entonces hasta nuestros días.
Comenzaba a germinar en la postguerra.
La Segunda Guerra Mundial
Se denominó la sociedad post-industrial.
Nueva York roba la idea de arte moderno durante la década de 1940.