realizată de Irina Maestre 16 ani în urmă
425
Mai multe ca aceasta
Envidia, traición, alegría por el mal ajeno... Tenemos un lado oscuro que mantenemos oculto por la vergüenza que nos produce y para no hacer daño a los demás.
Está bien que los malos pensamientos permanezcan secretos; aunque no podamos dominarlos del todo, sí podemos dirigir nuestros actos para construir con ellos nuevos hábitos más positivos para nosotros y nuestro entorno.
Este sentimiento es dificil reconocerlo ante los demás, porque la vergüenza que nos producen hace que los mantengamos en secreto.
De todas las ideas negativas que rondan nuestra mente, ninguna nos avergüenza más que la envidia.
Es el sentimiento con peor reputación y más duro de admitir, porque hacerlo significa declarar que uno se siente inferior y celoso del éxito de los demás.