Referencias:
Presentado por: ERIKA PATRICIA ESPEJO LÓPEZ ID 100066639
Trápaga, Ortega, C. M. (2018). De la psicología cognitiva a la neuropsicología.
Padilla, López. L. A. (2016). Diccionario de neuropsicología.
Redolar, Ripoll, D., Blázquez, Alisente. J. L., & González, Rodríguez, B. (2013). Neuropsicología.
Ardila, A., & Rosselli, M. (2007). Neuropsicología clínica.
FUNCIONES EJECUTIVAS
Luria fue uno de los precursores de la neuropsicología y quien en su planteamiento
de sus “bloques funcionales” en el año 1974 (citado en Tirapu, 2009), hacía
referencia a aquel encargado de la programación y control (tercer bloque
funcional), el mismo que años más tarde fue acuñado por Muriel Lezak como
“funciones ejecutivas”, definiéndolas como aquellas capacidades para formular
metas, planificar procesos y estrategias, ejecutar planes y aptitud para llevarlas
de manera eficaz (Lezak, 1982).
Shallice en 1988
(citado por Tirapu, 2009), las definió como aquellos procesos que relacionan ideas,
acciones simples y movimientos, que orientan hacía la solución de situaciones
consideradas complejas (Tirapu, 2009; Gonzáles, 2015).
Sholberg y Mateer en el año 1989 (citados por Tirapu, 2009), asumieron que las FE abarcan un conjunto de procesos cognitivos, resaltando entre ellos: La elección de objetivos, la anticipación, la planificación, la selección de la conducta, el autocontrol, la autorregulación y el uso de la retroalimentación o feedback externo que recibe el sujeto (Tirapu, García, Luna, Roig y Pelegrín, 2008 A).
Tirapu, García, Ríos y Ardila (2011), proponen que dicho constructo se refiere a la habilidad que poseemos para hallar soluciones frente a una situación problemática novedosa, siendo necesario para ello, el llevar a cabo una serie de predicciones o pronósticos de las posibles consecuencias a las que podemos
llegar con cada una de las soluciones planteadas.
Las funciones ejecutivas son actividades mentales complejas, necesarias para planificar, organizar, guiar, revisar, regularizar y evaluar el comportamiento necesario para adaptarse eficazmente al entorno y para alcanzar metas (Bauermeister, 2008).
Dentro de las funciones ejecutivas encontramos diferentes procesos fundamentales para nuestro día a día:
Capacidad de calcular de manera aproximada el paso del tiempo y la duración de un suceso o actividad.
Proceso de realizar una elección entre varias alternativas en función de nuestras necesidades, sopesando los resultados y las consecuencias de todas las opciones.
Capacidad de ignorar los impulsos o la información irrelevante tanto interna como externa cuando estamos realizando una tarea.
Habilidad que nos permite realizar cambios en algo que ya estaba previamente planeado, adaptándonos así a las circunstancias de nuestro entorno.
Facultad que nos permite resolver problemas de diversa índole de manera consciente estableciendo relaciones causales entre ellos.
Capacidad de generar objetivos, desarrollar planes de acción para conseguirlos y elegir el más adecuado en base a la anticipación de consecuencias.
Capacidad de almacenamiento temporal de información y su procesamiento. Se trata de un espacio en el que la información específica está disponible para su manipulación y transformación durante un periodo particular de tiempo.
LÓBULOS FRONTALES
Incluye
Corteza prefrontal o Corteza Frontal Granular
Dorsolateral
Mesial
Orbital
Areas 9,10,11,12,13,14,15,45,46,47
Corteza Frontal o Corteza Frontal Agranular
Area de Broca
Campo ocular frontal
Area de asociación
Area motora primaria
Regula personalidad y afecto
Organiza las formas de conducta más complejas
Patologías frontales alteran conducta social, motivación, control de procesos cognitivos
Programación de la actividad motora
Inhibición de respuestas inmediatas
Abstracción
Solución de problemas
Regulación verbal del comportamiento
Reorientación del comportamiento
Adecuación de la conducta a normas sociales
Habilidad para diferir el refuerzo
Integración temporal de la conducta
Integridad de la personalidad
Prospección de la conducta