Los enunciados en la comunicación pueden clasificarse en distintas categorías según su función y características. Los prescriptivos buscan influir en el comportamiento de las personas, sin que se pueda determinar su verdad o falsedad, sino su validez y justicia.
Su función estriba en exteriorizar estados de ánimo. A pesar de que no es frecuente referir criterios de evaluación de los mismos, solemos calificarlos como sinceros o no sinceros, según efectivamente correspondan o no a los estados internos manifestados.
‘‘Espero que te vaya muy bien’’, es un ejemplo de estos enunciados.
interrogativos
son aquellos por los que se formula una interrogación.Para algunos constituyen un caso especial de los prescriptivos ya que implican una solicitud de información.
‘‘¿A qué hora dijiste
que comenzaba la función?’’
Performativos
No describen algún aspecto del mundo, ni indican a alguien que se comporte de cierta manera, sino porque al emitir el enunciado, se produce un cambio en el mundo.
‘‘te juro que...’’no estoy decribiendo el hecho de haber jurado, ni prescribiendo a alguien que efectúe un juramento, sino que, al emitir ‘‘te juro’’, ¡estoy jurando!
Prescriptivos
no buscan describir o proporcionar información acerca del mundo, sino hacer que alguien se comporte de cierta manera. De los enunciados prescriptivos no se puede predicar verdad o falsedad, sino, en todo caso, que son válidos o inválidos, justos o injustos, racionales o irracionales, etc.
‘‘Dieguito, Clemente, David, Frida: ¡Dejen de pintar sobre las paredes!’’, es un ejemplo de esta clase de enunciados, pues en él se ordena realizar cierto tipo de conducta
consistente en dejar de pintar las paredes.
aseverativos, informativos o descriptivos
Se caracterizan por proporcionar información acerca de algún aspecto del mundo y por el hecho de poder ser evaluados en términos de verdad o falsedad.
‘La nieve es blanca’’ es un ejemplo de los mismos, cuya
verdad o falsedad podemos determinar por medio de
constatación directa con los hechos