Durante el siglo XIX, el neocolonialismo se manifestó principalmente a través de la explotación económica de las regiones colonizadas. La devaluación de las materias primas y la importación de bienes manufacturados crearon un déficit comercial perjudicial.
La externa deuda asumida por muchos países es también un factor relevante en el proceso.
La devaluación de las materias primas que exportan y la venta de bienes manufacturados de mayor valor añadido generan un déficit comercial nocivo para estos países.
Carencia de medios técnicos y capital.
La concentración de la producción en
ciertas materias primas para exportar a Europa
Dependencia de las importaciones de la metrópolis.